Pacientes, familiares de afectados, organizaciones sociales y activistas de derechos humanos, se concentraron este jueves en la Plaza Alfredo Sadel de Las Mercedes, en Caracas, para exigir al gobierno venezolano la activación de los mecanismos de cooperación internacional ante la grave situación del derecho a la salud en Venezuela que ha sido calificada como emergencia humanitaria compleja, debido a la severa afectación a la vida e integridad de las personas y a la incapacidad del Ejecutivo para tomar medidas que conduzcan a la superación de la crisis.
«No queremos morir» fue la consignada empleada por personas provenientes de Caracas, Valencia, San Felipe y Maracay, afectadas por diversas condiciones de salud, para denunciar lo que se ha convertido en una sentencia de muerte producto de las constantes interrupciones y ausencia de tratamientos, fallas en los servicios de atención en salud, escasez y alto costo de medicamentos para enfermedades crónicas como diabetes, VIH, cáncer, parkinson, entre otras. «Estamos aquí en la lucha por el medicamento porque tenemos tres meses que no nos llega el medicamento, que es de alto costo y retiramos por el seguro social», manifestó Jesús Colmenares, paciente transplantado proveniente de Maracay. Junto a él unas 50 personas con su misma condición denunciaron las calamidades que atraviesan debido a la ausencia de tratamientos.
Betty Hernández quien padece artritis rematoidea denunció que desde hace dos años no consigue los medicamentos necesarios para tratar su condición. «Eso me ha frenado toda mi vida, estoy aquí para exigir mis derechos. Tengo derecho a no acostarme y levantarme con dolores».
Por su parte Francisco Valencia, Director Ejecutivo de la Coalición de Organizaciones por el Derecho a la Salud y la Vida (Codevida), y paciente transplantado de un riñón, afectado directamente por la crisis actual, dijo que la actividad tuvo como propósito seguir denunciando y presionando para que se produzcan soluciones, «vinimos a exigir los derechos que están establecidos en la Constitución y visibilizar ante el mundo lo que está ocurriendo en materia de salud, especialmente en el tema de medicamentos e insumos, que afecta a 300.000 personas», expresó.
La actividad sirvió de marco a la celebración de la cuarta asamblea pública de Codevida, organización que ha documentado y denunciado la existencia de una profunda crisis en la atención sanitaria y nutricional de la población venezolana debido al grave colapso de los sistemas de salud y de abastecimiento a nivel nacional.
Feliciano Reyna director ejecutivo de Acción Solidaria y miembro de Codevida expresó que desde la coalición han planteado al gobierno medidas para superar la emergencia, sin embargo, lamentó la posición del Ejecutivo, «hemos visto la completa negación por parte del gobierno de esta situación y el rechazo a la posibilidad de la cooperación internacional», afirmó. «Rechazamos las declaraciones de las autoridades del gobierno venezolano con las cuales se insiste en negar la situación de emergencia humanitaria por la que atraviesa el país y les hacemos directamente responsables de las muertes y severos daños a la salud y al estado nutricional de los grupos de población más afectados», añadió Reyna.
En un documento entregado a un grupo de parlamentarios asistentes al evento, Codevida solicitó a la Asamblea Nacional la apertura de una investigación para determinar las responsabilidades individuales de los funcionarios del Estado, por la crisis de la salud en Venezuela y las muertes evitables o daños irreparables causados a las personas afectadas por la emergencia humanitaria compleja actual.
Prensa Provea