En el medio de una emergencia humanitaria compleja, este 15 de enero se celebra en Venezuela el día del maestro, pero el sector profesional afirma que no tiene nada que celebrar; salarios de hambre, escuelas en pésimas condiciones, malas condiciones de trabajo y un contrato colectivo violentado son algunas de las preocupaciones que viven día a día las personas que tienen una de las labores más importantes de la sociedad: ser educador.
En conversación exclusiva con Provea, la profesora y dirigente del sindicato colegio de profesores, Raquel Figueroa, expresó que en el medio de esta crisis, los educadores tienen que construir un movimiento para luchar por la exigencia de sus reivindicaciones, con un gran movimiento pedagógico para defender la carrera docente, para defender la educación democrática. Además, la maestra nivel 6 -máxima escala educativa- aseguró que en la actualidad la dictadura no solamente tiene pisoteada la educación, sino que también tiene a sus docentes, el pilar fundamental de la pedagogía, en el suelo. «Este 15 de enero los educadores no tenemos en absoluto nada que celebrar, por el contrario, tenemos mucho que luchar, luchar para defender la educación, para salvar la educación democrática, para restablecer el valor salario, para restablecer el valor y la importancia del trabajo pedagógico» enfatizó.
Ser educador en Venezuela es una tarea heróica, una de las profesiones más golpeadas por la dictadura de Maduro y su cúpula. En el #DiaDelMaestro los maestros no tienen nada que celebrar, al contrario, su lucha por recuperar sus derechos es más urgente que nunca #15Ene pic.twitter.com/mEmkhpWlkY
— PROVEA (@_Provea) January 15, 2020
Desde Provea hemos documentado durante los últimos años cómo la dictadura de Maduro se empeña en ocultar cifras y mentir al país al respecto de la matrícula educativa, maestros activos y aulas abiertas. Para el período escolar del año 2018 y según cifras de nuestro informe, 7.644.869 estudiantes ingresaron a las aulas de clases, un “aumento” de 16,37% en cifras del gobierno que representa 449.534 alumnos, cifra que debido a la no publicación de la Memoria y Cuenta del Ministerio de Educación, resulta poco probable de aceptar con el aumento a la deserción escolar debido a la migración forzada y problemas económicos y sociales de las familias más vulnerables, sumado a la tendencia en baja que venía registrando el área en los últimos dos años, donde la matrícula escolar disminuyó en 683.203 estudiantes. En este escenario, el informe a voces de aumento en inscritos, no tiene el respaldo suficiente para ser validado.
Según datos de nuestro informe, se resaltan cifras como las del estado Nueva Esparta, donde se vivió un 50% de ausentismo laboral de personal docente, administrativo y obrero motivado a la crisis de transporte y alimenticia, como también en estados como el Táchira, donde de 4.072 educadores fijos, 250 también abandonaron las aulas. Para el 2019, este escenario ha empeorado, solo en la primera semana de clases más del 90% de los maestros no se presentaron a sus salones, esto según Gricelda Sánchez, secretaria de Reclamos de la Federación Venezolana de Maestros, quien confirmó que para septiembre de 2019 un docente nivel IV con 15 años de servicio cobraba unos $3 quincenalmente (tasa oficial BCV 09/2019); lo que demuestra la violación sistemática a la contratación colectiva pactada el 10 de abril de 2018 con el sector, donde se habían acordado tres aumentos progresivos generales, aumentos que hasta la fecha han quedado en promesas inconclusas por parte del gobierno de facto de Maduro, medidas que el sector exige se cumplan.
A continuación, redifundimos el capítulo educación de nuestro último informe anual. Descargue y ayude a difundir.
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