El párroco de la parroquia San Alberto Hurtado, en la parte alta de La Vega, Caracas, aseguró que con la salida de DirecTV se cerró el parque de entretenimiento interno que tenían las familias, único que se mantenía en la situación de cuarentena y que era plural, por lo que abogó por que el Gobierno no tome la señal para colocar un nuevo servicio ideologizante


El pasado martes 19 de mayo, la población venezolana se vio sorprendida por la salida de DirecTV, servicio de televisión por suscripción que tenía la mayor parte de los usuarios en el país. Ante la ausencia de canales de televisión que no estén alineados con el gobierno de Nicolás Maduro, la posibilidad de un esparcimiento alejado de la propaganda y el objetivo ideologizador se vio truncado debido a que los servicios de televisión por cable tienen poco alcance, algo que ha dejado a la familia venezolana sin uno de sus medios principales de entretenimiento.

La sorpresa inicial se convirtió posteriormente en una protesta en las principales ciudades del país. En Caracas, tanto en sectores de clase media como los populares hubo fuertes y prolongados “cacerolazos” mientras se producían intervenciones de funcionarios del Ejecutivo en cadena nacional; una muestra de que, en tiempos de cuarentena y de crisis económica, la supresión del medio de distracción que quedaba generó un profundo rechazo.

El padre Alfredo Infante, párroco de la parroquia San Alberto Hurtado, ubicada en la parte alta de La Vega, al suroeste de Caracas, aseguró que, en esa zona, la salida de DirecTV se vivió como un duelo, como cuando una familia ha perdido un ser querido. Advirtió que el cierre de ese canal de esparcimiento puede contribuir a multiplicar la ansiedad de las personas en estos tiempos de cuarentena y propiciar la tensión y la violencia familiar e incluso comunitaria, pues se está afectando un derecho humano fundamental, como es el derecho a la recreación.

Salida de DirecTV es lamentable

“La salida de DirecTV ha sido un hecho muy lamentable, porque ante la situación de emergencia en el país, que existía desde antes del COVID-19 y se venía profundizando en Venezuela, uno de los derechos que más se sacrificó fue el derecho a la recreación y el esparcimiento. Si la gente apenas le alcanza para comer, entonces va sacrificando espacios que son tan importantes como lo comida, y el derecho a la recreación y al esparcimiento es un derecho fundamental”, afirmó el padre Infante.

El párroco de la parte alta de La Vega, quien es un activista del derecho humano a la recreación, explicó que desde 2016 se fueron estrechando y reduciendo las posibilidades de la gente para el esparcimiento. “Nosotros nos planteamos cómo recuperar ese derecho y comenzamos a crear espacios alternativos de convivencia. En ese contexto pues mucha gente fue buscando alternativas en DirecTV, no es que no existiera antes, pero se incrementó el consumo porque salía más barato tener una suscripción a DirecTV que salir a pasear”.

Acotó que el servicio por suscripción se convirtió en un espacio importante para la familia, para el esparcimiento, no tanto para la información, porque ya para ese momento los canales informativos habían sido sacados en su mayoría de la parrilla, pero sí para la diversión.

Confinamiento se hace cada vez más difícil

Para el padre Alfredo Infante, con la salida de DirecTV se está sacrificando, en un contexto de pandemia y distanciamiento social, la recreación de la población, por lo que para la gente se está haciendo cada vez más difícil el confinamiento y porque muchas personas deben salir a procurarse el sustento para las necesidades que hay que cubrir, y cuando llegan a su casa no tienen lo que el párroco llama “el parque interior que la familia tenía para compartir y reunirse”.

“Conversando con una mamá me decía ‘ahora me va a costar más atender a mis hijos y las tareas de la casa. Mis hijos a tal hora tenían tales programas educativos o de entretenimiento, pero ahora tengo que estar pendiente de la comida, de los servicios básicos, y el tutor que era la programación de entretenimiento no está’. También se le complica al niño porque no tiene ese espacio de entretenimiento”, indicó el padre Alfredo Infante.

Otra experiencia que le relataron al párroco de la parte alta de La Vega cuando la salida de DirecTV, vino de una señora cuya mamá veía diariamente la programación religiosa de los canales. “Independiente de la religión que fuese, para las personas de la tercera edad era un espacio constante de oración, entretenimiento; ahora quedan estas personas, que son vulnerables ante el COVID-19, y por ende no pueden salir de sus casas, sin ese parque de distracción interno”.

También se refirió a los jóvenes, para quienes el fútbol es un medio de entretenimiento muy importante. “Los canales deportivos que transmitían los partidos del fútbol europeo tenían mucho consumo interno en los barrios. El fútbol europeo tiene un gran impacto en los sectores populares, como en otros tiempos lo tuvo el basquetbol, ahora es el fútbol, era un espacio de entretenimiento, de expandir la mirada. Los jóvenes son afectados y la gente de mediana edad también tienen la carga atenderlos”, explicó.

Tensión y violencia

El padre Alfredo Infante cree que la salida de DirecTV va a significar una reconfiguración de la convivencia familiar, un escenario donde considera va a haber mayor tensión. “Lamentablemente creo que en muchos casos habrá un aumento de la violencia intrafamiliar, contra los niños y las personas de la tercera edad”.

En su opinión, la salida de DirecTV es un tema preocupante de DDHH. “Soy un defensor del derecho humano a la recreación, que es un alimento para la mente, y si no hay salud mental lo demás difícilmente se logra. En este momento que necesitamos una mayor estabilidad emocional para afrontar los miedos y la incertidumbre te quitan ese piso de entretenimiento y aumenta el caos” advirtió.

Tristeza Profunda

-El primer día que salió DirecTV observamos que hubo protestas y cacerolazos, ¿cuál fue la reacción que observó en su comunidad?

-La primera reacción fue de una tristeza profunda. En esta zona no hubo una reacción de indignación, más bien de tristeza, de duelo profundo. El impacto de la salida de DirecTV ha sido de duelo, como cuando pierdes algo, te quitan algo importante en el que te afianzabas para vivir la cotidianidad tan amenazada.

-Ese derecho a la recreación, ante la situación de la pandemia ¿no devela que hay un problema subyacente en nuestros barrios de falta de espacios?

-Sí, antes de la pandemia ya eso era un problema. Desde la pastoral nuestra nos tomamos en serio el derecho a la recreación. Creamos una escuela que llamamos, la de Pastoral Integral San Alberto Hurtado, donde hay fútbol, kickinbol, danza, para que los muchachos tuvieran espacios de recreación. Gracias a Dios en la parte alta de La Vega hay canchas. Lo que hicimos fue organizarnos para reactivar esos espacios porque si se nos niega desde el Estado el derecho nosotros lo reactivamos.

Mayor control

-Hay una decisión del TSJ que ordena la restitución del servicio. Al parecer el Estado va a tomar las instalaciones e intentará restablecer el servicio. ¿Cree que el Estado debe ser quien restituya ese derecho a los ciudadanos?

-El Estado tiene que crear las condiciones en el marco jurídico y político para que los medios privados puedan actuar y ofrecer sus servicios. El Estado no debería tomar el servicio, y si lo hace está procediendo a un mayor control y estatización. No debe ser fácil (restablecer la señal), podrán asumir los equipos, pero no la programación, o podrán hacer lo que hicieron con TVES, que toman los equipos y la señal, pero en términos de la calidad de programación es uno de los canales que la gente rechaza por lo ideologizante que es.

A juicio del padre Infante, una de las cosas buenas que tenía DirecTV era que era un entretenimiento que distanciaba a las personas de la diatriba política, ya que, a su juicio, la gente en cierto sentido, está agotada de ella. “Era un entretenimiento neutral y ayudaba a drenar. Si la toma el Estado no tendrá la señal y si busca una, será una de carácter chino o rusa, con todos esos filtros y no será neutral donde las personas puedan elegir qué ver”.

Entretenimiento educador

El padre Alfredo Infante resalta que había programas en el servicio de DirecTV que, mientras podían otorgar entretenimiento, proveían educación y valores ciudadanos.

“Yo era seguidor de la Ley y el Orden -indicó el padre Alfredo Infante-, y la recomendaba porque me parece que es una serie de televisión que no solo entretiene, sino que educa, porque si en algo insiste esa serie es en la cuestión del debido proceso, en cómo el Estado debe garantizar la ley y que, si hay respeto a la ley, hay orden. Otro elemento importante es el modelo policial, uno investigativo, serio respetuoso del debido proceso, entonces ves que la investigación y el juicio deben respetar la ley y los procedimientos. Además de todo eso, te entretiene porque sus capítulos abordaban dilemas éticos importantes; yo la consumía, pero también la promovía porque veía que era una manera de formar a la gente en derechos humanos y cómo debe funcionar el Estado”.

Sostiene el padre Alfredo Infante que, ante la salida de Directv, si esa pluralidad de elección para elegir el entretenimiento se pierde porque el Estado asume el control de los equipos de la compañía y busca una señal “a imagen y semejanza de la ideología del gobierno no va a haber pluralidad”.