La Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim) capturó el 18 de febrero a cinco efectivos del Ejército, quienes habían desertado y desde Colombia manifestaron su apoyo al presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, en la localidad fronteriza de Ureña.

Según el exalcalde de Ejido, estado Mérida, Omar Lares, “no cabe duda de que a estos militares francotiradores los capturaron en territorio colombiano. Seguro los engañaron haciéndose pasar por algún tipo de organización para ayudarlos”, según dijo en entrevista para el diario ABC.

Al parecer, efectivos del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) realizan su trabajo de inteligencia en Colombia, aprovechando cualquier oficina diplomática en territorio colombiano. Desde ahí rastrean a sus objetivos y armarían sus operativos de captura.

Un militar venezolano, quien prefirió quedar en el anonimato, contó al rotativo español que entrar en el vecino país es “muy fácil” por cualquier lado que lo haga, ya sea por trochas o por los puentes internacionales usando la Tarjeta de Movilidad Fronteriza.

“Nosotros entramos igual que todo el mundo a Colombia con la tarjeta de Movilidad Fronteriza. Nadie nos dice si somos o no militares. Es muy fácil para la Dgcim o Sebin hacer inteligencia y si queremos pescar a alguien (capturar un objetivo político), lo metemos por las trochas que igualmente las controlamos nosotros”, asegura desde Cúcuta.

Esta información sale días antes de que se lleven a cabo conciertos en los puentes Simón Bolívar y Tienditas, así como la llegada de la ayuda humanitaria, que según Juan Guaidó entrará “sí o sí” a Venezuela.

Además, se da cuando recientemente un grupo de senadores estadounidenses, acompañados de dirigentes políticos como Gaby Arellano, José Manuel Olivares y Lester Toledo, quienes son buscados por la Justicia venezolana, visitaron la frontera por motivo de lo que se espera el 23 de febrero.


Michelle Vento Salom | Provea