Desde la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos expresamos nuestro respeto por el dolor y duelo de la familia y el entorno del señor Alan García Pérez, quién tomó la trágica decisión del suicidio frente al mandato de detención preliminar contra él y otras ocho personas por las investigaciones de delitos de corrupción. La muerte de una persona es siempre un hecho lamentable y doloroso.
Lo ocurrido debe ser esclarecido en el marco de las investigaciones por delitos de corrupción que actualmente se llevan en el sistema de justicia, salvaguardando el derecho a la verdad que demanda el país. En este sentido, expresamos nuestro rechazo a cualquier forma de uso político de estos sucesos, en particular si éste busca atentar contra el derecho a la verdad y la justicia de miles de peruanas y peruanos.
Expresamos también nuestro respaldo a las y los funcionarios públicos, que continúan con la lucha contra la corrupción y por la justicia en nuestro país, en especial a las y los fiscales del Equipo Especial Lavajato. Como plataforma nacional de organizaciones de derechos humanos, continuaremos acompañando a las víctimas de las graves violaciones a los derechos humanos y corrupción en sus demandas por verdad y justicia.
Lima, 17 de abril del 2019