Los venezolanos que ejercieron su derecho al voto, tanto en las elecciones municipales y regionales del 21 de noviembre como en las elecciones para elegir la representación indígena el 26 de noviembre y la elección de gobernador en Barinas el 9 de enero, lo hicieron convencidos de que el conflicto político puede ser dirimido de acuerdo a reglas claras de convivencia democrática.
Los electores que concurrieron a las urnas en dichos comicios lo hicieron además convencidos de que la participación en procesos electorales, la movilización de los actores políticos y los avances en materia de institucionalidad electoral son pasos fundamentales para el regreso al estado de derecho y el fortalecimiento de las instituciones en Venezuela.
Este importante hito en la historia política reciente de Venezuela se concretó en gran parte gracias al trabajo de las nuevas autoridades electorales, el cual resultó en el diseño e implementación de una serie de avances técnicos e institucionales críticos para el fomento de la confianza ciudadana y la transparencia electoral.
Es necesario reconocer, que las graves limitaciones y violaciones que caracterizaron algunos de los tramos claves del proceso electoral apuntan a la necesidad de avanzar en el fortalecimiento de la independencia y autonomía del Poder Electoral. En este sentido, es imperativo avanzar en la reestructuración del CNE y la reforma del marco legal que norma los procesos electorales, de manera de otorgarle al ente electoral los instrumentos necesarios para asumir, en plenitud, el rol de árbitro y garante de la institucionalidad democrática.
Los venezolanos mostraron su voluntad de apoyar y profundizar la ruta electoral, impulsando con su voto el camino del entendimiento y de la disputa regulada por el poder, dejando en ese proceso importantes lecciones para el liderazgo político.
Estos mensajes de la ciudadanía ratifican la necesidad de avanzar en la construcción del camino de diálogo y negociación política permanente, en todas las instancias en que ello sea necesario, para el fortalecimiento de las instituciones democráticas.
En este marco, desde el Foro Cívico ratificamos nuestra convicción sobre la necesidad de avanzar en el proceso de negociación política, que tiene actualmente en México su mayor expresión, así como de apuntalar y fortalecer el proceso de diálogo social y político entre la totalidad de los actores nacionales.
Los venezolanos viven un momento histórico decisivo. Nos toca fortalecer el camino de la acción política, reavivar la convicción democrática y reafirmar los valores de la convivencia.
Caracas, 19 de enero de 2022.