“Los venezolanos deben defender a quienes los defienden”. Con esta afirmación, el director del Centro de Derechos Humanos de la Universidad Católica Andrés Bello (CDH-UCAB), Eduardo Trujillo Ariza, presentó la campaña “365 días trabajando por tus derechos”, iniciativa comunicacional que busca acercar y hacer visible, en sectores populares, el trabajo de las ONG de DD.HH. El abogado y profesor de Derecho Constitucional ofreció una rueda de prensa, este 17 de mayo, en las instalaciones del Parque Social Manuel Aguirre de la UCAB, para informar sobre el objetivo de este proyecto, que se sustenta en la distribución, en barriadas capitalinas, de más de 40 mil almanaques con los nombres y datos del CDH y otras organizaciones de derechos humanos. El proyecto también contempla la realización de charlas formativas, dirigidas a líderes comunitarios, y foros académicos sobre este tema. “Estamos clarísimos de la necesidad e importancia de socializar en las comunidades populares este tema y visibilizar la utilidad que pueden tener las organizaciones de asistencia humanitaria y protección de los ciudadanos, porque son los habitantes de las comunidades más vulnerables los beneficiarios principales de las organizaciones dedicadas a la defensa de derechos humanos y de actuación humanitaria. Suele ser el más necesitado el que es víctima de ejecuciones extrajudiciales de cuerpos policiales, de abusos del Estado, el que tiene mayor dificultad de acceso a servicios públicos, etc. Sin embargo, muchas veces es el que menos conocimiento tiene sobre estas organizaciones o cómo acceder a ellas. Por eso decidimos activar esta campaña”, dijo Trujillo Ariza, quien estuvo acompañado en la conferencia de prensa por la directora de Extensión Social de la UCAB, Adle Hernández, y el director general de Comunicación, Mercadeo y Promoción de la UCAB, Jaime Bello-León, DD.HH. a la vista y en el bolsillo Los 20 mil calendarios de pared y 20 mil de bolsillo, producidos por el CDH UCAB como parte de la campaña “365 días trabajando por tus derechos”, contienen los datos del Centro y de 12 de sus organizaciones aliadas: Provea, Funcamama, Cepaz, ODH-ULA, Civilis, Espacio Público, CDH-Unimet, Acción Solidaria, Codhez, Codehciu, Convite y Defiende Venezuela. Las piezas serán repartidas en varias barriadas capitalinas, con el apoyo de los propios dirigentes vecinales, las ONG que aparecen en los materiales impresos y la Dirección de Extensión Social de la UCAB. “Decidimos hacer almanaques porque son piezas informativas y utilitarias que van a estar, por lo menos, 12 meses en las casas, comercios y en los bolsillos de quienes los tengan. Las ONG que allí aparecen son una muestra del trabajo en distintas áreas que se hace en el país desde la sociedad civil. Pero el calendario es una metáfora para enviar el mensaje a distintas personas de que las organizaciones de derechos humanos y que trabajan en temas humanitarios están allí, los 365 días del año, al alcance y trabajando por los ciudadanos, son útiles para la gente, generan valor agregado y es necesario que se mantengan haciendo su trabajo sin ninguna interferencia”, comentó Trujillo Ariza. El profesor e investigador agregó que las clases magistrales, que se realizarán a lo largo del segundo semestre del año en varias localidades de la capital, ofrecerán información acerca de las garantías fundamentales consagradas en la Constitución y en tratados internacionales, y orientación respecto a la red de más de 200 organizaciones que laboran en la defensa de los derechos civiles, políticos, sociales, económicos, culturales y ambientales en el país. La directora de Extensión Social de la UCAB, Adle Hernández, confirmó que esta unidad colaborará con la implementación de esta campaña en los sectores en los que trabaja, especialmente Antímano, La Vega y Caricuao, donde mantiene una relación fructífera con dirigentes vecinales, gracias a la labor de acompañamiento que las distintas unidades realizan en las áreas de salud, educación, atención psicológica, desarrollo social y apoyo jurídico. “Desde Extensión Social realizamos un trabajo conjunto universidad-comunidad en pro de la transformación social. Nosotros creemos que la transformación es posible y que viene dada por ese alianza en la que también se involucran las organizaciones que, como este caso en particular, trabajan por los DD.HH. los 365 días al año. Por eso, un proyecto como el que lidera el CDH es tan importante para nosotros. El CDH ha estado trabajando fuertemente en esta propuesta para que en los sectores populares podamos formar actores clave que están comprometidos con sus comunidades en el conocimiento de los aspectos fundamentales de los DD.HH. No solo para conocerlos, sino para que ellos sean agentes multiplicadores de esta información que es clave y fundamental”, expresó Hernández. El dique de contención ante la arbitrariedad El director del CDH-UCAB apuntó que esta campaña nació como parte de una estrategia para alzar la voz ante el “cierre de los espacios cívicos” y el aumento de la “persecución y criminalización de ONG y activistas”. “Queremos plantarle cara al cierre de los espacios cívicos y a cualquier idea que plantee que las organizaciones independientes de derechos humanos le hacen daño al país. Nada más el año pasado tuvimos dos organizaciones con procesos judiciales abiertos y actualmente hay un defensor de derechos humanos que está preso: Javier Tarazona, de Fundaredes. Ante esto y otras decisiones que buscan limitar o desprestigiar a las ONG de Derechos Humanos y que trabajan en temas humanitarios, queremos recordarle a la gente que el trabajo por el ser humano, el trabajo en favor de las personas vulnerables es razón de ser nuestras organizaciones”. El profesor aclaró que las dimensiones de esta iniciativa son modestas y que se suman a otras acciones, propias y colectivas. “Sabemos que esta campaña no es una solución en sí misma. El problema del cierre de espacios cívicos es grave. A través de esta campaña estamos educando y concientizando a la población sobre la importancia de las organizaciones, pero hay otros espacios donde también participamos, como la incidencia pública, la incidencia internacional en los tomadores de decisiones, para mostrar en Venezuela y ante la comunidad internacional procesos que nosotros consideramos regresivos”. Sobre esto último, puso como ejemplo el proyecto de Ley de Cooperación Internacional que se discute en la Asamblea Nacional y se sumó a las voces de preocupación por el contenido de este instrumento. “En ese proyecto hay unos elementos llamativos y conceptos jurídicos indeterminados que pueden implicar la ilegalización de muchas organizaciones, lo que es contrario al derecho a la libertad de asociación. Pero una de las cosas que más preocupa de esta ley es que se pretenda, en el plano de los hechos, disuadir la formación de nuevas organizaciones de derechos humanos en el país. Eso sería gravísimo. En un estudio reciente que publicamos en el CDH-UCAB se evidenció que en la etapa de mayor autoritarismo en el país se incrementó el número de ONG y de personas que se involucraron en la defensa de los derechos humanos, lo que muestra que la sociedad civil venezolana tiene una voluntad de resistir la arbitrariedad, aun a pesar de los esfuerzos estatales por que esto no ocurra. Las organizaciones de DD.HH. son dique de contención frente al autoritarismo y eso estaría en riesgo si se aprueba el proyecto de Ley de Cooperación Internacional”. También se refirió a la reciente querella penal por difamación que interpuso el gobernador de Carabobo, Rafael Lacava, contra los activistas de derechos humanos Marino Alvarado (de la ONG Provea) y el sacerdote jesuita, Alfredo Infante, del Centro Gumilla, quienes exigieron en marzo una investigación contra Lacava por las presuntas ejecuciones extrajudiciales cometidas por funcionarios de la policía de ese estado. “El derecho penal no debe ser usado para perseguir a la libre expresión ni a la defensa de derechos humanos. Obstáculos como este tipo de investigaciones no van a paralizar la atención que organizaciones independientes hacen en Venezuela sobre violaciones de los derechos de la población con necesidades de protección”, advirtió. Ante este y otros embates del Estado, Trujillo Ariza insistió en la necesidad de que la sociedad civil organizada y los propios ciudadanos se mantengan unidos. “Es imprescindible que las organizaciones mostremos la cohesión necesaria para tener una voz lo más uniforme posible frente a esos ataques. Pero el llamado es también a los venezolanos, que deben concientizar la situación y defender a quienes les defienden”. Por eso, reivindicó el propósito de la campaña que el CDH-UCAB puso en marcha y aseguró que servirá para generar incidencia en la materia. “Que una, 50, 100 o 1.000 personas reciban el mensaje de este calendario y sepan en un momento de apremio que cuentan con alguna de estas organizaciones de derechos humanos puede hacer la diferencia. Cuando la persona en riesgo potencial recibe la información adecuada sobre derechos humanos puede salvar su vida. Además, esta campaña es algo puntual, pero al final lo importante es dejar claro el mensaje: las organizaciones de derechos humanos independientes en el país están 365 días trabajando por los derechos de la gente, en la medida de sus posibilidades y con limitaciones. Pero la voluntad y el conocimiento para trabaja por la gente está allí”, finalizó. ***** Sobre el CDH-UCAB El Centro de Derechos Humanos de la Universidad Católica Andrés Bello (CDH-UCAB) es la primera iniciativa universitaria de derechos humanos en Venezuela. Desarrolla su labor en las actividades tradicionales de la academia, tales como formación, investigación, extensión y el acompañamiento jurídico de casos en las siguientes áreas: derecho a la participación, libertad de expresión, sistemas internacionales de protección, justicia transicional, esclavitud moderna y protección de personas refugiadas y migrantes. Para más información está disponible su página web, https://cdh.ucab.edu.ve/, y su cuenta @CDH_UCAB en Twitter. |
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