El gobierno de Nicolás Maduro inició una nueva ola de detenciones arbitrarias contra un grupo de trabajadores, activistas, dirigentes políticos y defensores de derechos humanos.
Emilio Negrín, Alcides Bracho, Reynaldo Cortés, Néstor Astudillo, Alonso Meléndez y Gabriel Blanco son algunas de las víctimas que han sido privados de libertad en los últimos días.
En nuestro programa Son Derechos conversamos con Diannet Blanco y Scarleth Mújica, familiares de Gabriel Blanco y Reynaldo Cortés, respectivamente, quienes expresaron su preocupación ante la privación de la libertad de los activistas.
“La solidaridad de nuestros vecinos estuvo siempre presente al momento del arresto de mi esposo, Gabriel se ha ganado el cariño de las personas de nuestra comunidad por el trabajo que ha venido desarrollando con los comités de los derechos humanos, exigimos justicia para nuestros familiares”, manifestó Diannet Blanco.
Por su parte, Scarleth Mujica expresó que aunque estas detenciones se han vuelto costumbre en Venezuela, se siente muy consternada por el hecho ocurrido, apuntó que la principal acusación en conjunta de todos estos defensores ha sido defender los derechos laborales de los trabajadores. “El gobierno se maneja con un instructivo que solo busca perseguir a los activista, acusarlos y meterlos presos. Para nadie es un secreto que un número importante de empleados del sector público estamos pasando por una regresividad de nuestra condiciones, alzar la voz atormenta el gobierno y como medida de castigo terminan implementando este tipo de acciones”, enfatizó.
Finalmente, ambas familiares se plantearon seguir exigiendo justicia al estado venezolano y que se garanticen sus derechos fundamentales por medio de un debido proceso para continuar recurriendo a la solidaridad del pueblo venezolano.
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