Feliciano Reyna, director de Acción Solidaria, ONG que presta acompañamiento y vela por los derechos de todas las personas con VIH/SIDA en Venezuela, aseguró que el gobierno de Nicolás Maduro no se atreve a reconocer que el país vive una crisis humanitaria porque sería reconocer el fracaso de su política sanitaria. Aseguró que mientras esto ocurre son cientos los ciudadanos que mueren por falta de tratamiento, alimentación o porque los centros de salud no cuentan con las condiciones para brindar la atención necesaria. Para Reyna la apertura de un canal humanitario es más que necesaria pues así ingresarían al país todos los insumos, medicamentos y alimentos requeridos para superar la crisis que hoy hunde al país en su peor momento económico, social, político y humanitario.
– ¿Vive Venezuela una emergencia humanitaria?
Venezuela está desde el año 2015 en un contexto definido por las Naciones Unidas y otros actores como una “emergencia humanitaria compleja”. Es un tipo de emergencia que produce tal grado de destrucción en la vida de las personas, tanto daño que supera las capacidades de quien lleve las riendas del poder en ese espacio -región o país- de responder por sí solo, y por tanto necesita una respuesta coordinada internacional para poder hacerle frente. La emergencia humanitaria compleja es un proceso de larga instalación, no ocurre de un día para otro como puede ser en un desastre natural, no es por un conflicto armado que produce sus propios daños; es producto de la acción humana en general por abuso de poder, va socavando todos los mecanismo de protección de la población: estado de derecho, libertad de asociación, libertad de expresión, acceso a la información pública y va también socavando las capacidades económicas, propiamente lo hemos visto en Venezuela.
– ¿Sería la primera vez que ingresa ayuda humanitaria al país?
Desde 2015 comenzamos a implementar programas de acción humanitaria, es decir, hemos ido trayendo al país ayuda en la forma de medicinas, insumos médicos, alimentos y otros. Después hemos ido empujando y trabajando para que agencias de las Naciones Unidas y otros actores puedan alimentar estos programas. Eso quiere decir que ayuda ha ido entrado y la que ha solicitado la AN nos parece absolutamente pertinente, además porque el régimen no ha querido admitir desde hace tiempo atrás que existe una situación de emergencia humanitaria, lo que se ha implementado es con muchísimo cuidado, no es una respuesta de la magnitud que necesita el estado.
– ¿Cree que el allanamiento en contra de la fundación Mavid en Carabobo se debe al respaldo de las ONG a la apertura de un canal humanitario solicitado por la AN?
Para nosotros el allanamiento a la sede de la Fundación Manos Amigas por la Vida (Mavid), que vela por los derechos de los pacientes con VIH/SIDA en el estado Carabobo, tuvo que ver con la capacidad que ha tenido esta organización de recolectar data sobre faltas en la entregas de medicinas, los efectos que eso ha producido sobre las personas, su monitoreo de los espacios de almacenajes y como la medicina queda parada por dos tres meses porque el ministerio no transporta y además su documentación de muertes que debieron haber sido evitadas, muertes que no debieron ocurrir por falta de medicamentos. Cuando plantean esto ante el Ministerio de Salud se produce una situación gravísima, que fue el allanamiento a la organización. Uno pudiera pensar que la medida después de presentar toda su documentación en el Ministerio de Salud puede tener que ver como está ocurriendo con médicos y enfermeras en algunos hospitales públicos, de decir, esta data no puede salir. Lo grave puede ser que no hay la preocupación por las muertes que está ocurriendo, sino porque la información no salga, eso es terrible y eso lo estamos viendo en diferentes sectores.
– ¿Subestima Nicolás Maduro a las ONG’s?
Sí, dijeron esta es una organización sola y aislada en Carabobo y se subestimó el grado de articulación que tenemos las organizaciones, el grado de solidaridad y compromiso con la posibilidad de que podamos actuar del lado de las personas. No solamente fue Mavid. Hay otras personas de la Red Venezolana de Gente Positiva (RVG+) y lo que uno va viendo es el interés de callar toda evidencia de que eso está ocurriendo.
– ¿Esperan nuevos ataques a las ONG’s?
Ya hemos venido trabajando articulados desde hace bastante tiempo, nuestras participaciones en el examen periódico universal que es una documentación en materia de DDHH en el país, todo lo que se ha llevado a la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) desde ese momento hemos ido articulándonos, somos cientos de organizaciones trabajando juntas y articuladas con organismos y asociaciones internacional. Probablemente en un terreno en el que lo social va a seguir agravándose en la medida en que no tenemos la respuesta humanitaria en la dimensión necesaria, es probable, una grandísima exigencia para nosotros en el trabajo, mucho de acompañamiento y afectación de DDHH y eso siempre pone en un poco en la mira de riesgo.
– ¿Es la ayuda humanitaria un tema de sectores políticos?
No cabe duda que en este momento la pugna es política y dura, en el momento en el que la AN órgano legítimo, esté poniendo el tema de lo humanitario en la agenda pública hace que este tema entre en esa pugna y al plantearlo como se ha planteado es poner al régimen frente a una acción de varios años que ha producido daños a la población y tiene que buscar como contrarrestar. Los efectos de esta solicitud es que la ayuda humanitaria entró en el terreno de la pugna política, sería lo más deseable sacarla lo antes posible de allí para que siga su propio camino.
– ¿Cuánto alcance tiene la ayuda humanitaria hasta ahora recabada?
Lo que está en frontera es limitado en su alcance, probablemente habrá cantidad de personas diciendo ‘esto me va a llegar a mí personalmente’. Pero eso probablemente no ocurra. Siempre se plantea en una situación de este tipo que la ayuda tiene como propósito salvar vidas y aliviar sufrimiento, por lo que los más vulnerables son los niños, mujeres embarazadas, personas con condiciones crónicas de salud.
– ¿Seguirán las ONG’s velando por los DDHH de los ciudadanos?
Esa articulación nacional e internacional es un paragua protector, por ejemplo: cuando ocurrió esto de Mavid, en muy poco tiempo empezaron de inmediato a salir comunicaciones, eso lo sintieron quienes practicaron la detención arbitraria y el allanamiento ilegal. Conscientes de que es un escenario de riesgo, de que en esta situación sui géneris pudiera por el trabajo que hacemos, por la visualización de DDHH podría significar un riego, lo que uno encuentra en todos es mucho compromiso en nuestros colegas y deseo de seguir acompañando. En Venezuela existe ceca de 70.000 pacientes con VIH, 60.000 de los cuales el Fondo Global para VIH, tuberculosis y malaria donó el tratamiento necesario para nueve meses, los otros 10 mil se quedaron sin ningún tipo de cobertura por recibir medicación especial. Ante esta compleja situación, Feliciano Reyna no duda en decir que “si no hay una apertura por parte del Gobierno para una respuesta humanitaria y para solución política hacia la voluntad de la población sobre quien deben manejar el poder en el país, vamos a estar en situaciones problemática. La vida está en riesgo, no es un juego”.
Por Orianny Granado especial para Provea y Diario Tal Cual