2019 se ha convertido en el año más mortal para los migrantes de América Latina. Así lo afirmó el portavoz de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), Joel Millman, durante la presentación del informe del Proyecto Migrantes Desaparecidos, que durante los últimos seis años, ha recopilado información sobre las muertes de migrantes ocurridas en las rutas migratorias de todo el mundo.
Un total de 634 personas migrantes murieron en las rutas de Centro y Sur América y el Caribe, situándose como la cifra más alta registrada por la OIM en el ultimo sexenio. En el Caribe se registraron 154 muertes, un considerable aumento si se compara con las 28 ocurridas en 2018. Según Millman, este aumento se explica “con una sola palabra que empieza por V: Venezuela”. El portavoz indicó que hay más de cuatro millones de venezolanos recorriendo las rutas migratorias de América Latina y el Caribe, y ello se traduce en un repunte en el número de víctimas mortales.
La mayoría de las muertes registradas en el Caribe, fueron de venezolanos que murieron ahogados intentando llegar a las islas de la región.
El representante de la OIM indicó que el corredor que va de Centroamérica al norte es ahora tan mortal como el Mediterráneo Central. Entre las 634 víctimas mortales en la región hay muchos salvadoreños, guatemaltecos, hondureños y haitianos porque no pueden permitirse pagar para usar rutas más seguras.
“La migración sigue siendo letal porque lo organizan criminales. Por eso, la OIM apuesta por una migración transparente y regular para que las organizaciones ilegales no controlen el proceso”, dijo el portavoz.
Accede a la nota completa en: Noticias ONU