Jorge Padrón, foto cortesía de Contrapunto

Jorge Padrón, geógrafo y Coordinador de la Asociación Civil Ecológica y Social Chunikai, alerta que las medidas del Gobierno de Maduro contra el cambio climático en Venezuela han sido nulas y contraproducentes con la lucha mundial por un ambiente más sano.


El Estado protegerá el ambiente, la diversidad biológica, los recursos genéticos, los procesos ecológicos, los parques nacionales y monumentos naturales y demás áreas de especial importancia ecológica.

Artículo 127 Constitución de Venezuela

(14/11/2022 – Prensa Provea) | En días pasados, el Gobierno de Nicolás Maduro asistió a la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, la también llamada COP27.

Maduro pidió la creación de un Fondo de Financiamiento de Pérdidas y Daños Climáticos a las potencias mundiales, para que Venezuela pueda conseguir financiamiento para la protección de la Amazonía y poblaciones vulnerables.

Pero, ni en el discurso de Maduro ni en las principales redes de los entes gubernamentales se habló sobre la alarmante deforestación en Venezuela, el impacto del Arco Minero del Orinoco, los recurrentes derrames petroleros en el país o la huella de las emisiones de gases de efecto invernadero.

Secuelas dela deforestación por la minería en la región del Arco Minero del Orinoco

Jorge Padrón, investigador del capítulo Derecho al Ambiente Sano del Informe Anual de PROVEA, alerta que el Gobierno de Maduro no solamente ha tomado medidas nulas contra el cambio climático, sino que también han sido contraproducentes hacia la lucha.

Como eliminar el Ministerio del Ambiente y crear un Ministerio del “Ecosocialismo” con menos poder o aislar al Instituto Nacional de Meteorología e Hidrológica «INAMEH» bajo entes de seguridad, ambos regularmente controlados por militares.

Provea conversó con el Coordinador de la Asociación Civil Ecológica y Social Chunikai, sobre la COP27, el impacto del cambio climático en Venezuela y la ausencia de respuestas del Estado venezolano ante sus responsabilidades ambientales.

¿Qué relación tiene Venezuela con la COP27?

Hay que partir con que estos son eventos internacionales, donde los Estados que integran la Convención del Cambio Climático participan en una conferencia ambiental que viene desde la Cumbre de Río de 1992, es decir, es una historia larga que ya arriba a su número 27. 

En el 2021 la COP26 se realizó en la ciudad de Glasgow, Reino Unido, en ese entonces la COP26 sonó igual como la de ahora, e igualmente como se aprecia con ésta hasta el momento, el resultado fue prácticamente insignificante.

La actual, la COP 27, se realizó en Sharm el-Sheij, ciudad de Egipto. ¿Qué tiene que ver Venezuela con este evento? Venezuela es parte de los países que firmaron la Convención del Cambio Climático, donde participan si no la totalidad, por lo menos un porcentaje altísimo de las naciones que integran las Naciones Unidas, en teoría todos preocupados por el futuro del planeta.

– ¿Cómo se encuentra Venezuela con el cambio climático?

Lo podemos ver con lo que ha venido ocurriendo en este año, en especial de septiembre a noviembre, evidentemente ha habido una acentuación de las condiciones extremas con las precipitaciones, impactando al territorio nacional una serie de ondas tropicales, una tras otra, con su alto volumen de agua y los efectos generados.

Padrón añade que el aumento de las lluvias no es común y no había ocurrido en mucho tiempo atrás. Alerta que el Estado tuvo que haber atendido la información aportada por Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (la NOAA, en sus siglas en inglés), que advertía que el fenómeno meteorológico denominado “La Niña” ocasionaría incrementos significativos de lluvias por probablemente tres años seguidos. 

“Venezuela fue golpeada por la onda tropical 41 cuyas precipitaciones detonaron el desbordamiento de cursos de agua e inundaciones en Las Tejerías, estado Aragua, acontecido el 08/10/22. Nueve días después sobrevino otro desastre, aludes torrenciales y desbordamiento de afluentes en el sector El Castaño, Maracay, en la misma entidad, afectada por abundantes lluvias generadas por la entonces onda tropical 44”

El geógrafo añade que ya transita la onda tropical 51 y el balance del impacto socio-ambiental en la nación es alto, especialmente en la Cordillera de la Costa, la zona litoral y algunos sectores de los Andes y el estado Zulia.

El vínculo de Venezuela con el cambio climático global es directo.

A pesar de que la realidad climática ha generado estragos en Venezuela y en todo el planeta, Padrón alerta que no se le puede achacar todo el saldo en pérdidas humanas, daños materiales y migración ambiental al cambio climático.

“El Ejecutivo Nacional no contribuyó con la mitigación al no tomar las medidas pertinentes de prevención, dado los anuncios internacionales relativos a la continuación de La Niña y las estimaciones de lluvias excesivas que ocasionaría por su extensión de 3 años. Lo que algunos especialistas aprecian raro, atípico y considerado como el propio cambio climático”

Con estas lluvias intensas e incesantes, en el mes de octubre llovió, por ejemplo en la estación de la Universidad Central de Venezuela, en 21 días con un volumen de agua más del doble que el promedio histórico, de acuerdo a los boletines del Departamento de Hidrometeorología de la UCV, se activaron en el territorio nacional una cantidad de procesos geomorfológicos dinámicos, desde aludes torrenciales hasta deslizamientos, pasando por desbordamientos de cursos de agua, que han impactado de una manera muy dura a las comunidades de las áreas de influencia. 

“Ahí hay una gran responsabilidad del país, principalmente del Estado, pero también de la sociedad en general, especialmente con lo que tiene que ver con la toma de medidas preventivas y con la necesidad de hacer el monitoreo” 

Con un anuncio internacional de condiciones meteorológicas extremas es necesario que institucionalice un sistema de monitoreo permanente, en especial en zonas mapeadas como de alto riesgo. En ese punto me pregunto ¿se cuenta con ese mapeo a nivel nacional? Tema que es responsabilidad del gobierno central, pero también de las alcaldías. 

No obstante, hay cosas que se escapan de las manos. Los fenómenos de los aludes torrenciales o deslaves, como el que ocurrió en la vertiente norte del Ávila en diciembre de 1999, sucedió en una zona boscosa que conservaba la vegetación poco perturbada, en un Parque Nacional. Y allí aconteció ese desastre, el más grande de ese tipo en la historia contemporánea en Venezuela, cuyas causas y descripción varios expertos lo han explicado. Pues algunos de esos especialistas señalan que ese grave escenario puede ocurrir y ya ha acontecido anteriormente (a escala geológica) del lado de la vertiente sur, del lado que da a Caracas. Panorama que obliga a planificar soluciones desde temprano desde una gestión integral de la ciudad.

Vaguada de Vargas, Venezuela, 1999

Es urgente un Estado responsable, tiene que haber autoridades municipales que vigilen, que hagan mapas de riesgo y se actúe con tiempo en caso de reubicación de viviendas, poblaciones, asimismo se invierta en construir las obras civiles que los estudios indiquen para ayudar a mitigar esas dinámicas geomorfológicas. Ahora es fundamental realizar el debido monitoreo hidrometeorológico.

Lamentablemente, en estos 25 últimos años se han desmontado las estaciones meteorológicas.

A propósito de la Cumbre COP27, ¿Qué medidas ha tomado el gobierno de Maduro, desde que asumió el poder, para luchar contra los efectos del cambio climático, sabiendo que se ha intensificado en los últimos 8 años?

Lo que te puedo decir es que la realidad te indica que ha sido muy poco o prácticamente nada; más bien las medidas que se han tomado han sido contrarias, han sido contraproducentes, una de ellas la eliminación del Ministerio del Ambiente.

Padrón alerta que al llamado Ministerio del Ecosocialismo le quitaron autoridad sobre el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inameh) y se la entregaron al Ministerio para Relaciones Interiores, Justicia y Paz.

“Se le quitaron al ente ambiental que venía gerenciándose con criterios técnicos ambientales. En los últimos años, ese instituto ha estado dirigido por militares; el que está en 2022 es un coronel, el cual anunció junto a un vicepresidente en mayo pasado que el Gobierno de Maduro iba a crear un nuevo sistema para prevenir inundaciones, el cual, si lo ejecutaron, su efectividad es nula”

El investigador ambiental advierte que el Ejecutivo nacional está señalando que el cambio climático es el responsable de lo acontecido, mientras no se ha hecho nada con la instalación de nuevas estaciones meteorológicas, ni se han activado las que existían antes: “Aquí hubo más de 300 estaciones, hoy en día son contadas, aproximadamente una tercera parte de lo que había hace 30 años”

Acciones nulas ante aumento de vulneraciones

Por otro lado, las otras políticas que ha venido aplicando el Gobierno que pudieran ayudar con el cambio climático “son nefastas” en palabras de Padrón. Señala que no se ha hecho nada con los focos de gases de efecto invernadero (GEI) en el sur de Venezuela, por las minas en la región del Arco Minero del Orinoco: “¿Qué se ha hecho con los rellenos sanitarios o los sitios de posición final de los residuos sólidos? La mayoría son botaderos de basura, los cuales no llegan a constituirse en relleno sanitario. No se aplican los principios de economía circular, no se aprovechan los gases que generan una alta emisión de gas metano, uno de los grandes responsables del llamado efecto invernadero”

Padrón también lamenta la falta de acciones efectivas con las emisiones de gases tóxicos que produce la industria petrolera, evidenciado en el sur de Anzoátegui y en Monagas, donde hay cantidades de mechurrios (Flare) que queman el dióxido de carbono (CO2) y otros gases tóxicos asociados a los componentes de los hidrocarburos, entre ellos azufre.

“Los ventean a la atmósfera, incluso los especialistas dicen que es mejor quemarlos que ventearlos, porque al ventearlos están arrojando metano y otros gases. Todo lo cual contribuye enormemente con el efecto invernadero, es decir, que en ese terreno no se está ayudando en nada para prevenir el cambio climático”

El Coordinador de la Asociación Civil Ecológica y Social Chunikai, añade que no se ha aprovechado los gases asociados con el crudo (“el gas natural”), para que, en lugar de contaminar el clima, se aproveche. Aunque recalca que el Estado tendría que hacer inversiones en cada sitio de producción de gas para convertirlo en gas licuado y que llegue a la población, lo que ayudaría a satisfacer una gran demanda de gas doméstico que ha estado en puntos críticos. Alerta que en estas zonas ocurren focos de contaminación de efluentes líquidos que impactan a comunidades campesinas e indígenas (como a los Kariñas en la Mesa de Guanipa) mientras se está quemando y emitiendo a la atmósfera esos gases tóxicos.

¿Qué retos enfrenta la población ante la presencia del Gobierno en cumbres climáticas, pero sin acciones ambientales reales?

Hay muchos retos, uno es vigilar que se cumplan las acciones comprometidas.

En varias oportunidades el Gobierno se ha comprometido con tomar medidas mitigantes. En el 2015 Venezuela presentó una línea de acción como país ante el Acuerdo de París, fue un acuerdo firmado dentro de otra conferencia sobre cambio climático, la COP21, que se celebró en la capital de Francia, en diciembre de 2015.

Se aprobó un documento donde planteaba que todos los países iban a hacer un esfuerzo por bajar 2 grados centígrados la temperatura de la Tierra y debían entregar un plan de acción nacional con fecha tope del 2020.

Documentos que no han discutido con la sociedad, con las universidades, con las instituciones pertinentes; quedando en líneas que se dan dentro de oficinas, que van de Miraflores a alguna oficina burocrática y viceversa. La información oficial es de poco accesible para el público, prevalece la opacidad.

Sí, aprobaron unos decretos en el 2021, reflejados en el informe anual de PROVEA, capítulo Derecho al Ambiente Sano, los decretos 4.585 y 4.586, pero Padrón señala que se comprometieron para buscar lo que él denomina como algún beneficio. Mediante el 4.585 del 21/9/2021 se nombró al ministro de Ecosocialismo como autoridad nacional ante el Fondo Verde del Clima, y el decreto 4.586 estableció la Comisión Presidencial, Comité Nacional del Fondo Verde.

“Más allá de esos decretos, más allá de esa información en la Gaceta Oficial, no se sabe más nada de esa situación, predomina la opacidad, ¿Qué se va a hacer con ese fondo verde? ¿Cuáles son las actividades? ¿Cuáles son las acciones? ¿Con quién se cuenta? ¿Dónde está publicado eso? No existe”

En esto, a lo cual contribuye la no publicación de las memorias y cuentas de los ministerios, prevalece un secretismo, una actitud de total oscuridad. 

Padrón señala que existe una ley fue aprobada en el 2018, la ley de Mega reserva de agua dulce y biodiversidad del Sur del Orinoco y la Amazonía, que establece todo un planteamiento de estrategia para preservar esos recursos donde están el 80% de las aguas del país y donde está una riqueza de biodiversidad. Plan que vale la pena implementar como la mejor contribución para una zona de amortiguación ante el cambio climático.

“Hay una cantidad de cosas que se pueden hacer, lo primero que tienes que rescatar son los ministerios, restituir el Ministerio del Ambiente y darle la importancia. Tiene que ser todo un trabajo de educación con la sociedad, rescatar esas instituciones, darle la competencia que tenían originalmente y reforzarlas con presupuesto”

Cambio climático como excusa ambiental

Jorge Padrón, geógrafo y Coordinador de la Asociación Civil Ecológica y Social Chunikai, advierte que no se puede decir que todo el daño ambiental es culpa del cambio climático, ya que suena a los que antes le echaban la culpa a la iguana cuando había fallas eléctricas.

“Efectivamente, hay una problemática con el cambio climático que se está evidenciando en el globo, por ejemplo, el verano del 2022 en Europa que ha sido de los más cálidos en su historia, o las inundaciones que se han acentuado en todo el planeta. Pero el Estado de cada país tiene que actuar, ser responsable”

En el caso venezolano, Padrón reitera que se tienen que reconstituir las estaciones meteorológicas, rescatar el Ministerio del Ambiente, apoyarse en las universidades que tienen personal capacitado y reforzar las instituciones con acuerdos junto a la sociedad civil organizada.

“Hay propuestas de soluciones ante el cambio climático, distintas ONG, como la Sociedad Venezolana de Ecología, Clima 21, SOS Orinoco, Observatorio de Ecología Política… hay una cantidad de organizaciones que vienen haciéndole un seguimiento a lo que está ocurriendo en el sur del país. Eso hay que tomarlo en cuenta, muchos de esos documentos tienen recomendaciones, los mismos informes de PROVEA, hay gente del mundo académico que ha venido trabajando con propuestas de bioeconomía, e igualmente organizaciones de origen religioso que han trabajado con comunidades indígenas en alternativas socioeconómicas en el Amazonas con años de experiencia. Se requiere rescatar todo eso”


Caracas, 14-11-2022 / Óscar Calles, Prensa Provea