Las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES), adscritas a la Policía Nacional Bolivariana (PNB), intervinieron en la muerte de 8 personas en el Distrito Capital y Miranda durante el mes de octubre, la segunda cifra más baja del año cuando solo en el mes de marzo de 2020 se contabilizaron 7 muertos por dicho cuerpo de seguridad.
El promedio mensual desde enero hasta agosto de 2020 fue de 16,5 ejecuciones extrajudiciales cometidas por la PNB-FAES, mientras que durante los dos meses posteriores (septiembre y octubre) bajó a 14,8.
Este descenso sucede luego de que el 25 de agosto el fiscal general de la República, impuesto por la Asamblea Nacional Constituyente, Tarek William Saab, solicitó la detención de funcionarios de la PNB-FAES señalados de ser los responsables de la muerte de dos trabajadores de Guacamaya TV en Cabimas, estado Zulia.
El 16 de septiembre hubo un pronunciamiento por parte de la Misión independiente de Determinación de los Hechos de las Naciones Unidas, cuyo informe señaló a Nicolás Maduro y a los ministros de la Defensa y de Relaciones Interiores, para ese entonces los generales Vladimir Padrino López y Néstor Reverol, de ser responsables de crímenes de lesa humanidad.
“La Misión encontró motivos razonables para creer que las autoridades y las fuerzas de seguridad venezolanas han planificado y ejecutado desde 2014 graves violaciones a los derechos humanos, algunas de las cuales –incluidas las ejecuciones arbitrarias y el uso sistemático de la tortura– constituyen crímenes de lesa humanidad”, expresó Marta Valiñas, presidenta de la Misión.
La reducción de casos de presuntas ejecuciones extrajudiciales perpetradas por funcionarios de la PNB-FAES confirma que la violencia que desata este cuerpo policial en las zonas populares constituye una política de Estado. Cuando se les ordena asesinar cumplen disciplinadamente las instrucciones. Cuando se les ordena disminuir el número de violaciones al derecho a la vida, obedecen. No se trata de funcionarios que por iniciativa propia actúan de una u otra manera. Ejecutan las órdenes de sus superiores.
Desmienten saldo en enfrentamiento
Como se apuntaba anteriormente, la PNB-FAES fue responsable de la muerte de 8 personas en el mes de octubre. En dos de estas ejecuciones extrajudiciales los familiares desmintieron a través de los medios que fueron saldos en enfrentamiento.
En las 6 restantes la versión oficial fue de “resistencia a la autoridad”, la forma en que funcionarios presentan públicamente las violaciones del derecho a la vida con el fin de justificar los asesinatos.
El primero de ellos fue Yoelvis Alexander Brito Rivas, de 33 años.
Yoelvis había alquilado una casa en el barrio El Carmen de la parroquia La Vega, en Caracas. El viernes 9 de octubre, aproximadamente al mediodía, funcionarios de la PNB-FAES llegaron buscando, presuntamente, a un peligroso delincuente.
Brito abrió la puerta de su casa y lo siguiente que se conoció de él, era que yacía en el suelo con dos impactos de proyectil: uno en el tórax y otro en el costado.
“Nosotros inmediatamente subimos al lugar y los vecinos contaron que lo ajusticiaron. Le dieron dos tiros y después dispararon varias veces al aire para simular el enfrentamiento”, señaló un familiar, cuya identidad quedó bajo resguardo, reportó el medio Caraota Digital.
La segunda víctima se trata de Jesús Alberto Mejía, de 21 años.
Según sus parientes, Mejía se encontraba afuera de su vivienda cuando llegaron hombres vestidos de negro.
La hermana de Jesús Alberto relató que lo único que le dio tiempo de decir fue que llamaran a su mamá para que tomara a su hijo de tres meses de edad.
“Mi hermano solo alcanzó a decirle a sus amigos: entréguenle el niño a mi mamá”, dijo la hermana.
Luego de decir estás palabras Mejía cayó al suelo tras recibir un disparo en el rostro.
Estos datos de Caracas y Miranda de disminución de asesinatos por parte de este cuerpo policial coinciden con lo ocurrido en otros estados del país, lo cual refleja que fue una orden nacional.
En próximas entregas estaremos publicando datos de otras entidades.
(*) Trabajo conjunto Centro Gumilla – Provea como parte de la observación a la violencia policial y militar en Venezuela.