ACERCA DEL AUTOR:

Author profile
Carlos Nieto Palma

Abogado y Coordinador de la ONG “Una Ventana a la Libertad”. Es columnista del diario El Nacional.

Carlos Nieto | El problema de los privados de libertad cada día tiende a ser más grave y la situación a empeorarse cada día más, todo esto lleva el agravante de que a quien le corresponde el control de los privados de libertad en Venezuela no reconoce sus responsabilidades y desconoce a 45 mil presos que están en Centros de Detención Preventiva y que aunque se empeñen en negarlo, es al Ministerio para el Servicio Penitenciario a quien le corresponde velar por estos reclusos y no a los organismos policiales, que tienen como función cuidar a los ciudadanos y no estar en sus comisarías cuidando presos, que es lo que ahora hacen.

Solo basta revisar el Decreto N° 8.266, mediante el cual se crea el Ministerio del Poder Popular para el Servicio Penitenciario, publicado en Gaceta Oficial N° 39.721 del 26 de julio de 2011 y ver que claramente su Artículo 2°, donde establece: “Son competencias del Ministerio del Poder Popular para el Servicio Penitenciario: 1. Diseñar, formular y evaluar políticas, estrategias, planes y programas, regidos por principios y valores éticos, destinados a garantizar el pleno goce y ejercicio de los derechos fundamentales de los procesados y procesadas, penados y penadas, así como procurar su rehabilitación y mejorar sus posibilidades de reinserción en la sociedad”.

En ningún momento este decreto hace distinción de presos, habla de procesados y penados sin exclusión, igualmente el Código Orgánico Penitenciario, en vigencia desde el 28 de diciembre del 2015 en todo momento se habla de personas privadas de libertad, solamente en su artículo 23 dice “Los establecimientos del Sistema Penitenciario se clasifican en establecimientos penitenciarios de régimen cerrado y de régimen abierto. Los establecimientos penitenciarios de régimen cerrado se clasifican en centros para procesados y procesadas judiciales y centros de penados y penadas, en los cuales se crearán espacios para los privados y privadas de libertad que, de acuerdo a determinadas características, requieren de un tratamiento específico y diferenciado del resto”.

Estamos a las puertas de un gran caos carcelario causado por la imprudencia y negligencia de los funcionarios que dirigen el sistema penitenciario venezolano, tenemos un hacinamiento cercano al 400 %

El Código Orgánico Penitenciario es claro también que los reclusos que están en proceso, también son de la competencia del Ministerio para el Servicio Penitenciario y no como la Ministra para el Servicio Penitenciario y su equipo de trabajo nos pretende hacer creer que los reclusos que están en proceso no le corresponden a ellos y en base a esta arbitrariedad y extralimitación de sus funciones han creado un caos en los Centros de Detención Preventiva, que ha fundado un sistema penitenciario paralelo que se los pretenden endosar a las policías del país cuya función es dar seguridad a la ciudadanía, combatir la delincuencia, detener a los delincuentes pero no estar cuidando presos, porque ese trabajo es del Ministerio Penitenciario.

Tenemos 45 mil personas detenidas en Centros de Detención Preventiva sin condiciones para tener personas detenidas por lapsos mayores a 48 horas, esto en más de 500 espacios regados a lo largo de todo el país, es decir se han creado más de 500 mini cárceles en todo el país, en el lugar que usted menos se lo imagine puede haber presos y muchos de ellos de alta peligrosidad que no deberían estar en esos sitios.

A esto le sumamos 55 mil reclusos que hay en las cárceles tradicionales que el Ministerio Penitenciario sí reconoce como de ellos, es decir tenemos una cifra aproximada de 100 mil personas presas en Venezuela, una cifra que jamás habíamos tenido en toda la historia penitenciaria venezolana.

Estamos a las puertas de un gran caos carcelario causado por la imprudencia y negligencia de los funcionarios que dirigen el sistema penitenciario venezolano, tenemos un hacinamiento cercano al 400 % y no vemos que se esté haciendo nada para darle solución al problema, la construcción de nuevas cárceles sigue siendo solo promesas incumplidas, mientras las mafias penitenciarias siguen haciendo buenos negocios en esos recintos, razón tenía el maestro Elio Gómez Grillo cuando decía que las cárceles eran un negocio tal productivo como PDVSA.

ACERCA DEL AUTOR:

Author profile
Carlos Nieto Palma

Abogado y Coordinador de la ONG “Una Ventana a la Libertad”. Es columnista del diario El Nacional.