Los discos de la agrupación Verbigracia, enfocados en canciones de denuncia sobre temas ecológicos que afectan al territorio venezolano, se obtienen mediante de la iniciativa “Música por medicinas” desarrollada por Provea
«Por gracia de la palabra» sería la traducción literal de la expresión latina Verbigracia, palabra que fue escogida por Robzayda Marcos Vera y Danilo Angulo para nombrar el dueto que, a fuerza de denuncia, ha querido leer y expresar a través de sus cantos la situación política venezolana desde un lugar distinto al polo del chavismo o de la oposición.
Desde hace siete años, la vocalista y el ejecutante de la guitarra han hecho del canto su forma de manifestarse y demostrar que su agrupación es un actor distinto en la política nacional. “No andamos diciendo lo que le conviene a un sector o a otro, sino que decimos la palabra completa y nos preocupamos desde el territorio donde vivimos”, comenta Robzayda.
Ya sea contra las atrocidades que se comenten en el Arco Minero del Orinoco, la explotación del cerro La Vieja (Lara) o las vejaciones a las que son sometidos los indios yukpas, Verbigracia ha sabido alzar su voz para denunciar la violación del humano derecho a vivir en un mundo mejor.
La pasión por la música en Robzayda corre por sus venas desde muy pequeña. Creció en una familia musical escuchando a Soledad Bravo, Hilda Vera, Cecilia Todd, entre otros referentes que le hicieron fomentar un gusto por la canción de denuncia porque se sentían invisibilizados en el panorama mediático. “Sentíamos que había un vacío en el país y es ahí cuando la canción de denuncia se hace necesaria”, asegura la vocalista.
En medio de un país que grita ante la constante violación de todos sus derechos por parte del gobierno, Verbigracia ha querido enfocarse en los temas ecológicos y defensa de los derechos de las poblaciones indígenas, tomando en cuenta que los estados en toda América Latina han pactado con una industria megaextractivista sin tomar en cuenta el irreparable daño que hace al planeta.
De allí su férreo rechazo al Arco Minero del Orinoco, cuya creación es visto por Verbigracia como «un decreto que los venezolanos no podemos admitir ni consentir bajo ningún precepto. No es solamente un ecocidio, sino que es el antecedente a la muerte del estado de derecho en el país”, afirma contundentemente Robzayda.
La cantante detalla que el Arco Minero “es una abolición de los derechos ciudadanos en 12% del territorio nacional” y advierte que allí puede haber lavado de dinero, tráfico de drogas y prostitución sin que ningún venezolano tenga derecho a actuar por sus derechos
A su juicio, al hablar del Arco Minero del Orinoco no solo se habla de un peligro ecológico, sino “de la muerte de los derechos de los seres humanos en ese territorio”.
Para la agrupación, aceptar el proyecto del Arco Minero es aceptar la explotación minera en el Cerro La Vieja, explotación en Valles del Tuy y en todos los lugares “donde están fraguando negocios a espalda de los venezolanos”, por lo que Robzayda Marcos rechaza que el Gobierno esté firmando convenios ignorando la voluntad del pueblo que dice defender y considera necesario pronunciarse cada vez con más fuerza.
Las canciones de Verbigracia son en su gran mayoría compuestas por Robzayda Marcos, y surgen del análisis y estudio de problemas que afectan al país. En la actualidad están involucrados en un proceso de investigación y levantamiento de información sobre lo que significó la migración forzada de los pemones hacia Brasil.
Al respecto, explica que fueron 1.800 personas que abandonaron su territorio tras el intento de Juan Guaidó de ingresar ayuda humanitaria en el 23 de febrero pasado, lo que derivó en represión contra los pobladores de Santa Elena de Uairén y otras comunidades fronterizas del estado Bolívar. “La ayuda humanitaria terminó siendo la excusa perfecta para que el Ejército invadiera, matara y despojara a los pemones de sus tierras”, sostiene Robzayda, quien dice que están ideando letras para abordar estos temas con contundencia.
Para denunciar su rechazo a la creación del Arco Minero, Verbigracia compuso “Contra el amo” y “Joyas de sangre dorada”, donde narran el ecocidio y genocidio al que someten a los habitantes de la zona.
Apadrinada por el talentoso músico y compositor venezolano Aquiles Báez, los integrantes de Verbigracia dicen estar “infinitamente orgullosos y maravillados por el gesto de Aquiles” y por su acompañamiento lleno de sabiduría.
Sin ánimo de lucro, la agrupación se ha negado a hacer de su trabajo un discurso mercantilista, por lo que se ha unido al la campaña “Música por medicinas” desarrollada por el Programa Venezolano de Educación-Acción en Derechos Humanos (Provea) para recolectar medicamentos que son entregados a organizaciones del área de la salud, con la finalidad de contribuir a paliar la crítica situación que atraviesa el sector.
«Queremos dar nuestro apoyo a una campaña que demuestra que los venezolanos son solidarios y no están de brazos atados a la espera de una solución vertical, sino que se organizan para dar respuesta a sus necesidades», puntualiza Robzayda.
Por Luna Perdomo alianza Tal Cual-Provea