En medio de un país donde la desigualdad marca el ritmo del dia a día entre las calles y donde las necesidades básicas arrinconan al ciudadano. Frente a la falta de políticas públicas y planes que propicien el avance, hay quienes continúan trabajando en aportar un grano de arena en medio de la tempestad y en construir un país a partir de la educación. Luisa Pernalete es uno de estas personas.

Luisa Pernalete ha trabajado en el área educativa por más de 40 años, sus aportes como activista de derechos humanos se han enfocado en la creación y mantenimiento de una “Cultura de Paz” cimentada en la educación. Actualmente es coordinadora del programa de Educación para la Paz de Fe y Alegría.

– ¿Cuál es el estado del derecho a la educación en Venezuela?

– Hablar del derecho a la educación en Venezuela es una tarea difícil porque no hay cifras oficiales, trabajamos con datos blandos que se convierten en datos duros. Existen miles de situaciones irregulares alrededor de la educación que no están siendo atendidas. Una de ellas es la falta de preescolares, sobre todo en las barriadas más jóvenes donde apenas hay un preescolar público.

Es importante atender esta situación, porque la educación preescolar permite enseñarle habilidades al niño para que este preparado para primer grado. Esta situación de los preescolares es mucho más grave en el interior del país, ya que hay madres que tienen que llevar a sus niños a preescolares alejados de sus hogares, por lo que invierten hasta una hora esperando unidades en algunas regiones, esto, sin contar el tema de los costos del transporte público.

Por lo tanto, es necesaria la universizalizaicón de la educación inicial. Para los niños que no han podido cursar estos niveles es fundamental una reinserserción pero con aulas especiales con maestros capcitados ¿Dónde están esos espacios?

La educadora denuncia que el Programa de Alimentación Escolar (PAE), no funciona correctamente, toma como referencia las cifras que anunció recientemente el Ministro de Educación Elías Jaua, donde destaca que el PAE cubriría alrededor de 15.000 aulas, dejando por fuera alrededor de 11.000 aulas.

Comenta que el derecho a la educación se ha vulnerado por distintos factores que forman parte de la crisis venezolana, destacando entre ellos la alimentación y la falta de políticas para solventar estas situaciones.

– ¿Cuáles han sido los efectos de la violencia en el ámbito educativo?

– La violencia está presente en el ámbito educativo de dos formas: interna y externa. Muchas veces hemos tenido que cancelar las clases por el entorno violento. Las situaciones recurrentes obligan a los padres a cuestionar si es seguro enviar a los niños a clase luego de alguna balacera, una madre me comentó una vez sobre estas situaciones: “Nosotros no suspendemos las clases, no mandamos a los niños porque queremos protegerlos.”

Pernalete asegura que para realizar la conversión de violencia a cultura de paz debe estar involucrado un “esfuerzo sostenido”, donde se incluya una gestión particular, soluciones y sobre todo un trabajo individual de los problemas.

“Cuando hablamos de cultura de paz involucramos acciones concretas, no es un operativo, la educación no es un tema para improvisar. La violencia directa se ha vuelto muy concurrente. Allí es donde el docente debe buscar resolver los problemas de forma pacífica, enseñarle a sus alumnos a excusarte y brindarle herramientas a los alumnos para promover la convivencia pacífica”

Convivir y reconocer al otro

Para la educadora la cultura de paz involucra un proceso complejo donde se reconoce el entorno y se hablan de situaciones de forma colectiva.

“En las escuelas de Fe y Alegría contamos con dos horas de guiatura una vez a la semana, este apartado lo mantenemos en revisión constante, porque aquí nos enfocamos en enseñar a convivir. Es necesario que se reconozcan y se haga un balance, en impulsar un concepto de aulas inclusivas.”

Comenta que la exploración de áreas recreativas puede ayudar a casos difíciles, los festivales de talento se han establecido como una opción infalible para ofrecerle otro entorno menos hóstil a los jóvenes.

– ¿Cómo es la situación de las listas escolares este año?

– Actualmente le decimos a las familias que lo más importante es que el niño vaya a la escuela, luego vemos lo demás. El tema de los útiles es sumamente costoso, alguien con salario mínimo no puede cubrir todo lo que piden los planteles. Desde hace un tiempo me guío por un índice referencial que llamo el “Indice del Lápiz”, en mayo de 2016 una caja de lápices costaba 950 Bs, ahora apenas la consigues e 10.000 Bs.

Una de la alternativas que recomendamos desde Fe y Alegría es utilizar papeles de reciclaje, reutilizar los materiales. Hay ciertos colegios que están abogando por alquilar textos y facilitarle este proceso a los padres.

Servicio psicológico 

La activista advierte sobre la carencia de servicios psicológicos para quienes hacen vida en los espacios educativos, haciendo especial énfasis en los desgastes psicológicos del profesor y en la importancia que el profesional sepa cómo administrar las emciones.

“La rabia es el disfraz de muchos miedos y ocasiona que aparezcan algunas agresiones físicas. Hoy en día hay muchas unidades educativas que no tienen psicólogo escolar ni consejero. Tomando todo esto en consideración es fundamental crear un servicio psicológico parta los docentes, nosotros también estamos sufriendo y necesitamos ser atendidos.”

Pernalete considera que el venezolano padece de un “síndrome post-traumático colectivo”, a raíz de la situación por la que atraviesa el país.

Por último, la educadora denunció que el derecho de la educación ha sido vulnerado en múltiples ocasiones para garantizar el derecho a la participación, catalogando el proceso educativo como un “tema serio”, donde el Estado venezolano no debe incorporar políticas improvisadas y aleatorias.


Prensa Provea
Daniel Klie