Igual que el resto del país, la Compañía Metro de Caracas se cae a pedazos. El presidente Nicolás Maduro quien salió de sus filas sindicales, hoy aplica un Plan de medidas económicas calificadas por los trabajadores como de “anti obrero”. Los despidos en ésta empresa pasan del centenar.

Deillily Rodríguez, joven madre y también dirigente sindical ha sido despedida del Metro de Caracas y lucha por su reenganche. El gobierno, que se reclama de los trabajadores, ha impuesto un salario mínimo, que no cubre el valor de la cesta básica y no hay en el país un solo trabajador que alcance la suma de dos salarios mínimos. La hiperinflación consumió en quince días la ficción del llamado “sueldo millonario”. El IVA saltó de 12% al 16%. Los servicios públicos aumentaron su costo y el gobierno ha “asomado” un nuevo aumento de la gasolina. Las tablas salariales han sido rechazadas por los trabajadores de las empresas básicas y en general han sido denunciadas por aplanar los salarios, atacar los contratos y la existencia de las organizaciones sindicales. Se generaliza la exigencia de que el salario sea igual al valor de la canasta básica y que se cumpla el Art. 91 de la Constitución.

A manera de contrastes las empresas invitadas a participar de la extracción en el Arco Minero del Orinoco son exoneradas de impuestos. Camino al fin del año 2018 persistieron las exigencias laborales y se produjo la detención de varios dirigentes sindicales. La libertad para los detenidos, la defensa del salario, el contrato y los sindicatos forman parte de las demandas de los trabajadores. El amparo a los puestos de trabajo y la lucha contra los despidos, también. Deillily Rodríguez, exige su vuelta al trabajo en la compañía Metro de Caracas y en esta entrevista nos respondió de la siguiente manera.


– Como primera pregunta y para que los lectores manejen la información ¿Quién es Deillily Rodríguez y cuál era tu ocupación en la compañía Metro de Caracas?

Deillily Rodríguez, es una joven, trabajadora del Metro de Caracas, con casi trece años de servicio. Madre de una niña de ocho años. Representante sindical electa por los trabajadores y ocupaba dentro de la empresa el cargo de operadora de protección.

La operadora de protección se encarga del cuidado a los equipos que hay dentro de una estación, para la atención a los usuarios. Es decir, se encarga de todas las personas que llegan con mal súbito, de atender partos de ser necesario, a las personas que se caen, se desmayan o tienen algún inconveniente. También estoy avalada por el CICPC, para hacer la remoción de cadáveres cuando ocurre un arrollamiento, que es cuando la persona se proyecta a la vía y es arrollada por el tren. Mi ocupación me ha llevado a atender varios arrollamientos, algunos partos y a personas que llegan con discapacidad en sillas de ruedas, movilidad reducida y a personas invidentes. Esto me ha traído muchos amigos, en la condición de invidentes como también entre las personas que usan sillas de ruedas. 

Soy madre luchadora. Y me califico así, por defender los derechos tanto humanos, sociales, como laborales.

Soy administradora. Fui despedida el pasado 31 de octubre por la empresa Metro de Caracas. Sin calificación previa, violando todos los derechos expresados en la Constitución y en la Ley Orgánica del Trabajo. Recibí una carta a través de un abogado de la empresa, donde se me aplicaba el artículo 79 de la LOTTT, conjuntamente con el literal i, en concordancia del artículo 18 del Reglamento de la LOTTT.

La abogada se presentó en el horario de trabajo, me pidió que firmara y que me retirara del lugar, sin prestar ninguna explicación de lo sucedido. Yo presumo que esto fue motivado a unas declaraciones que di en la Plaza Caracas, en la toma de los diferentes gremios y sindicatos, que están conformando la Intersectorial sindical.

El periodista me preguntó: ¨¿Cuáles son las actuales condiciones de la empresa?¨ Yo le respondí que la situación del Metro de Caracas, todo el mundo la conoce, tanto los trabajadores como los usuarios. Cada quien puede sacar sus propias conclusiones: ¿Cómo ha venido decayendo el sistema? ¿Cuánto tiempo deben esperar entre un tren y otro? ¿Cuánto tiempo esperan en una parada del metro bus? ¿Cuantas escaleras mecánicas están funcionando en cada una de las estaciones? ¿Cómo se ha generado el nuevo cobro del pasaje que se implementó nuevamente y no tiene eficiencia, cuando cobran un boleto y luego lo rompen los milicianos? El servicio no está trabajando adecuadamente y que nosotros internamente no contábamos ni con agua potable.

Y bueno, ¿Quién es Deillily hoy día? Es una desempleada que va a seguir luchando por los derechos de los trabajadores, por los míos propios, por el bienestar de mi hija y el bienestar de las mujeres que hemos venido enfrentando los obstáculos que la realidad nos ha venido imponiendo por años.

– Deillily, explícanos ¿Cuál es la situación de seguridad y socio laboral de los trabajadores del Metro?

Bueno, quizás en el momento en el que di las declaraciones muchos compañeros sintieron que ellos hablaron a través de mí. Pero se puede ampliar la información ya que existen otros aspectos vulnerados en las condiciones de trabajo en el Metro. Nosotros tenemos mucho tiempo sin recibir la dotación de uniformes, la entrega de insumos y hasta calzado de seguridad. Nosotros no tenemos la ergonomía que corresponde a la Lopcymat. Desde hace mucho tiempo que las condiciones de trabajo no son las adecuadas.

Como te decía, a mí me toca atender a las personas que se desmayan o si se presenta un parto. En mi cargo yo estoy obligada a atender el material de implementos y medicamentos. El gabinete de primeros auxilios debe estar al día. Pero en mi gabinete ni siquiera había un par de guantes. Los únicos protectores que había, eran míos. Fíjate, a lo que estamos expuestos al no contar con los insumos. Esto solo al exponerte los casos más sencillos y referidos a mí cargo.

Pero, también lo podemos ver, desde el punto de vista del mecánico que está desarrollando una función más fuerte. Por ejemplo: sin los zapatos de seguridad. Yo en lo particular tenía más dos años sin recibir la dotación de uniformes. 

Nosotros tenemos que exigir el cumplimiento de los mecanismos e insumos de seguridad, como los zapatos, los uniformes y en los actuales momentos eso no lo está garantizando la empresa. Un ejemplo de esto hace poco a un compañero le explotó un stinller, que es un dispositivo eléctrico que está debajo de los trenes. Y le explotó muy cerca de la cara. Él estaba solo y haciendo labores de mantenimiento cuando le ocurrió y eso se debe a las improvisaciones que hace la empresa con falta de recursos. Otro es el caso de un compañero, que recibió un disparo tratando de colocar los cables de la “Y” de Mamera. Esos cables son sustraídos casi todas las semanas y la empresa lo sabe. Se estaba haciendo el trabajo de reposición de los cables eléctricos, en una zona descubierta y sin el resguardo ni la seguridad necesaria para que los compañeros trabajaran. La consecuencia de esto, es que tenemos un compañero que recibió un disparo en la pierna, porque la gente pensó “que intentaban interrumpir el robo de los cables”. Es ahí cuando notamos que los usuarios, no se imaginan a lo que estamos expuestos los trabajadores. Los escasos recursos de los que disponemos y por lo que tenemos que pasar, para poder brindarles el servicio que ellos se merecen.        

Pero aparte de eso, tenemos que lidiar con el señalamiento de que: “los trabajadores del Metro son unos saboteadores”, “que estamos haciendo operación morrocoy”. Cuando la realidad, es que a los equipos no se les está haciendo el mantenimiento adecuado. Que los trabajadores no reciben los suministros, implementos y herramientas necesarias para realizar las labores de mantenimiento y que nosotros no tenemos ni siquiera agua para ofrecerles a las personas -cómo ya te había dicho- en caso de desmayo, como tampoco para el consumo del personal. Ellos no ven, que una de las fallas es la falta de recursos de la empresa o el deterioro acumulado en partes del sistema. Algunos creen, que se trata de acciones de saboteo. Y debo aclarar, que en ningún momento  los trabajadores del Metro hemos realizado acciones de saboteo. Los trabajadores del Metro somos muy institucionales. Y si tú me preguntas, que porque los usuarios cambian de actitud al entrar a una estación del Metro, la respuesta es que la cultura Metro, te cambia.

Yo iba a cumplir trece años en la empresa y de verdad que esto era otra cosa, muy distinta a lo que estamos viendo hoy en día. El usuario te irrespeta, gracias a las campañas que han hecho, “de que nosotros somos saboteadores”. Por el contrario. Las autoridades no admiten realmente en qué es en lo que están fallando. Las condiciones que tenemos hoy en la empresa son bastante tristes, por no decir otra cosa. Estas condiciones no permiten un transporte de calidad. Los usuarios piensan que les estamos saboteando el sistema, porque exigimos aumento de salarios. Nosotros somos trabajadores, que abrimos las estaciones desde las cinco y media de la mañana, cerramos a las once de la noche, y muchas veces trabajamos hasta las dos o cuatro de la mañana, cuando hay algún evento.

El de este año, fue hace poco. El Suena Caracas. Nosotros trabajamos toda la noche por el evento. Exponiendo la vida de los compañeros, pues no contamos con suficiente personal de seguridad. Lo que quiero es que quede bien claro que no es cierta esa campaña que dice que los trabajadores somos saboteadores, porque el usuario tiende a tomar represalias con los compañeros, quienes se están exponiendo a ser víctimas de una multitud molesta por fallas en el servicio. La gente no entiende -de repente- que a un tren que no se le realiza el mantenimiento adecuado por falta de inversión, presente una falla y no se pueda mover con las personas dentro, por que pierde la propulsión. La gente no lo entiende y no quiere retirarse del tren, porque piensa que es por antojo de los compañeros.  Eso nos puede traer consecuencias a futuro.

– ¿Como se encuentra la lucha por tu reenganche. Que pasos has tomado en la lucha por tu retorno al trabajo?

Yo he cumplido con los pasos legales. Me presenté ante la Inspectoría y me amparé. Tengo mi número de expediente. Como te dije fue un despido de forma ilegal porque no se hizo la calificación previa. No sé qué pruebas pueda presentar la empresa. La solidaridad de mis superiores ha sido manifiesta y de verdad se los agradezco. Agradezco la solidaridad de las personas de la asociación de ciegos y los compañeros en sillas de ruedas, que me han llamado. Y ahora tenemos la Intersectorial, en la que estamos uniendo gremios, sindicatos y federaciones. La solidaridad se está haciendo sentir. También he tenido solidaridad internacional con trabajadores de transporte subterráneos en países como Brasil, Argentina, trabajadores de Bolivia y muchos otros de diferentes países.

Hay muchos trabajadores que no se sienten representados con la directiva del sindicato actual y manifiestan su solidaridad. El sindicato y la empresa son la misma corriente, tengo compañeros en condición de reenganche autorizados por la Inspectoría y el sindicato no se enfrenta a la empresa para propulsar su reenganche, lo que debería hacer un sindicato dedicado a la defensa de sus trabajadores, este se aboca a defender al patrono. En una entrevista en la presidencia de la empresa, la asesora legal del Metro, Martha Cortiño, nos dijo que la empresa se reserva el derecho a reenganchar, a lo que yo le pregunté: ¿Si el reglamento interno de la impresa, o lo que ellos consideren está por encima de las LOTTT, la Constitución y hasta de los convenios internacionales suscritos por la República? Y ellos, no nos han sabido responder.

– ¿No han recibido respuestas ante el despidos?

No el despido no es solo el mío. Somos aproximadamente más de cien. Muchos compañeros ya decidieron irse del país, por estos amedrentamientos. Algunos con orden de reenganche y la empresa se niegan a reintegrar. Lo que sí es bien cierto es que le hemos llevado varios documentos a diferentes entes internos de la empresa y gubernamentales, donde exigimos el reenganche. Cuando el señor Francisco Torrealba, -constituyentista- indica a través de los medios que él no nos conoce, que desconoce los casos, que somos un grupito. Yo quisiera decirle a él, que recuerde que él me recibió en varias ocasiones junto al Frente de Trabajadores del PCV, en la Casa Amarilla, donde le facilité el listado de los compañeros que ya habían sido despedidos, yo como dirigente sindical en condición de trabajadora activa. Y hoy en día formo parte de los trabajadores despedidos, bajo las mismas condiciones en las que fueron despedidos mis compañeros. Entonces, si él no conoce ese tipo de cosas, bueno que busque una forma de hablar con nosotros. Aunque yo he hablado muchas veces con él. Y de verdad que no hemos recibido ninguna respuesta. Al igual que Claudio Farías, nos recibió en el Ministerio del Transporte. Dijo que él iba a plantear al ministro de transporte lo que nosotros estábamos solicitando allí. Que por lo menos se respetara la condición laboral de nosotros. Y no fue así.

Mi compañero y yo, por lo menos dos casos, nos reunimos por un tiempo varios lunes en el Ministerio del Transporte con Claudio Farías, y no fue respetada nuestra condición de trabajadores activos. Y en mi caso, ni siquiera mi fuero sindical, porque mi período se acaba en el 2020. Yo hice todo lo que tenía que hacer, ampararme, se cubrieron los pasos legales. Y solo tengo que esperar que la empresa como tal, asuma que fue un despido injustificado y que haga el reenganche.

– ¿Sufriste alguna amenaza por el presidente de la empresa o alguna actitud retaliatoria por parte el sindicato antes de ser despedida?

Yo tengo unas denuncias en fiscalía con la directiva de Sitrameca en contra de ellos, porque uno de sus directivos ofreció en una asamblea de trabajadores, caerme a coñazos. Con esas palabras textuales. Entonces siendo él un hombre, delante de muchos compañeros, ofreció caerme a coñazos. Esta persona también había ido a mi casa en una oportunidad a decirme que me quedara tranquila. Que si yo lo que estaba buscando era un piso político, que dejara que el río cogiera su cauce. Yo, sin embargo, pienso que cuando uno defiende lo que es justo uno no tiene porque tener miedo. Entonces seguí en mi lucha, con mis planteamientos, porque yo creo que nosotros no estamos defendiendo nada que este fuera de la Constitución, fuera de la LOTTT y fuera del Contrato Colectivo. Que son nuestros beneficios y nuestras condiciones laborales.

– ¿Cual fue la actitud de los trabajadores del Metro de Caracas ante tu despido, más aun en las condiciones en las que se realiza?

Yo he tenido gracias a Dios mucha solidaridad entre mis compañeros. Mis compañeros me han respaldado. Sin embargo, esto fue un amedrentamiento para generar temor entre los trabajadores. Porque si yo tengo trece años en la empresa, y tengo fuero sindical y fui despedida por decir que no había agua. ¿Que quedará para ellos? Entonces de alguna forma esta retaliación es para generar temor entre los compañeros y desvirtuar la lucha. 

– Es evidente un ataque frontal a un sector del sindicato y la ubicación del otro sector parcializado en torno al patrón. ¿Cómo ven los trabajadores del Metro esa situación? 

Los trabajadores del Metro, si tú haces una encuesta, la mayoría están en contra del sindicato. Pero el sindicato es apoyado por el patrono. Todas las gerencias, la mayoría de los gerentes, son parte de los familiares del constituyentista Edison Alvarado. Entonces ¿Dónde tú como trabajador puedes dirigirte o quejarte de una gerencia que no esté trabajando en su totalidad, o que te reprima, que te amedrente si el mismo sindicato es el patrono? Los trabajadores no están de acuerdo con esas políticas, pero lamentablemente el sindicato cuenta con el respaldo del gobierno y está apadrinado haciendo lo que le da la gana. De hecho podemos decir que casi toda la empresa es de los Alvarado.

– La política del gobierno de las tablas salariales, ¿cómo se expresa en la vida de los trabajadores del Metro?

Las tablas salariales que se han impuesto de forma reciente no es como dice Francisco Torrealba, que no son unas tablas únicas para todos. Claro que sí. Se perdió la meritocracia, se perdió el grado de responsabilidad. Nuestras tablas vienen por grados, porque cada grado tiene una responsabilidad distinta y eso no se está respetando. Hoy la diferencia entre un grado y otro, más o menos son cien bolívares.

No recibimos talones de pago. Nosotros no sabemos qué es lo que nos están pagando. Eso nos tiene en desconcierto, de que es lo qué está pasando. En muchas ocasiones tú ibas a pedir un talón de pago porque ese es el procedimiento, y no los están elaborando. No tienes un soporte para poder hacer los reclamos con respecto a los que generamos. Nosotros trabajamos en tablas de rotación. Trabajamos feriados, trabajamos nocturnos y todo eso influye en el pago de los salarios. 

– Emblemático ha sido que el presidente de la república, proviniera de las filas sindicales del Metro. Por esa causa, se cataloga así mismo como presidente obrero. ¿Cómo quedan los derechos laborales en el Metro de Caracas?

Siempre que he tenido la oportunidad, le he hecho un llamado al presidente de la República que en todas sus alocuciones se muestra como presidente obrero. Si en realidad es un presidente obrero y viene del  Metro de Caracas, él debe preguntarse ¿Qué está pasando?, ¿Porque los compañeros del Metro de Caracas, están en las calles? ¿Porque tanto amedrentamiento? ¿Porque no cuenta con un respaldo dentro de la empresa Metro de Caracas y que responsabilidades puede haber en la gestión de la directiva sindical Sitrameca en este caso la gerencia de Edison Alvarado que ya va para trece años en la dirección de ese sindicato?

Y sería ideal como dicen muchos entes del gobierno. Hacer una comisión de la verdad dentro del Metro de Caracas, para que sepa de forma veras que es lo que está sucediendo. Si es así como se lo pintan, o será que él tiene desconocimiento de que es lo que está pasando. No se tengo la duda. Porque no creo que pueda tener tanta gente descontenta dentro del sistema y él no lo sepa. Si es que esta engañado.

– ¿Que opinión te merece el impulso de la Intersectorial de Trabajadores ante la situación general de los trabajadores en el país?

Yo creo que un paso adelante lo dieron las enfermeras, con su lucha. Es necesaria la creación de esta Intersectorial y es necesario que participemos todos los trabajadores tanto de las empresas públicas como privadas, porque nosotros tenemos que valorar lo que es nuestra mano de obra. Pienso que con una sola institución no se va a poder generar lo que la intersectorial -que serían todos los gremios, hasta trabajadores no representados en sindicatos, federaciones y sindicatos- nos proponemos y de alguna forma vamos hacer presión, porque los trabajadores somos más.

Pero además, los que no nos queremos ir del país queremos trabajar y debemos trabajar por un salario digno. Este año es decisivo. Decisivo para todo. Porque nosotros como trabajadores debemos continuar en esta lucha, para lograr hacer entender al gobierno, el gobierno que esté, que los trabajadores tenemos derechos. Y es más yo creo que nosotros, la parte obrera debe formar parte del gobierno.

– Es fundamental lo que está pasando ahorita. Prácticamente hay un despertar de las luchas de los trabajadores. ¿Como lo ves?

Yo lo veo con mucha emoción, porque la gente se está dando cuenta que ya, si no salimos a la calle a pelear nuestros derechos, no habrá ningún organismo que los defienda. También con mucha rabia lo que está sucediendo con los compañeros que han sido detenidos. Porque esos amedrentamientos los hacen intencional para que desvirtuemos las luchas. Pienso que esta lucha se va a fortalecer. 


Armando Guerra | Especial para Provea