Desde el observatorio para la defensa de la vida (Odevida) se hace este llamado de auxilio: el gobierno de Nicolás Maduro está extremando las medidas contra defensores de derechos humanos. Su intolerancia a la diferencia se está traduciendo en detenciones arbitrarias y largas como la que sucedió con la defensora de derechos humanos Rocío San Miguel quien lleva detenida ocho meses en el temible helicoide de Caracas, tratada por el fiscal venezolano, Tarek William Saab como una terrorista, reducida su humanidad a la mínima expresión. A pesar de que Amnistía Internacional expresó su rechazo ante esta detención, al Régimen simplemente no le importa nada.
En el primer semestre del 2024, con una elección en ciernes, 6 activos defensores de derechos humanos están detenidos arbitrariamente, y sometidos a procesos judiciales violatorios del derecho al debido proceso, acusados por delitos tales como traición a la patria, conspiración, asociación para delinquir, terrorismo e incitación al odio. Nunca en Venezuela se había detenido a defensores de derechos humanos, lo que sin duda es una señal de alerta para la comunidad nacional e internacional.
El Centro para los Defensores y la Justicia (CDJ) en su informe “Situación de las personas defensoras de derechos humanos en Venezuela. Primer semestre 2024” documentó 592 ataques e incidentes de seguridad durante el primer semestre de 2024, reflejando el agravamiento de la criminalización, represión y control social en contra de quienes promueven, defienden y exigen derechos humanos. Preocupa a ODEVIDA que los 592 ataques e incidentes documentados en el período comprometen y afectan derechos de las personas y organizaciones defensoras de los derechos humanos, representen un incremento del 92% en comparación con el mismo período del año 2023, en el cual se según el CDJ registraron 39 pre situaciones.
A pesar de las cifras que se presentarán en este informe existe una preocupación latente desde ODEVIDA y es el caso de subregistros. Se tiene la certeza de que, por miedo, por intimidaciones, no se está llevando el número exacto y el nombre de los torturados, los amenazados, los detenidos, los agredidos. Defender los derechos humanos en una dictadura es un delito de alto riesgo y eso es lo que estamos denunciando acá.
Uno de los puntos sobre los que se ha focalizado el régimen es en atacar a PROVEA. Así viene sucediendo por lo menos desde hace una década. Durante lo que llevamos de 2024 se han conocido por lo menos tres acciones que han puesto en riesgo a algunos de sus integrantes. El 9 de septiembre del 2024, después de los desafueros cometidos durante las elecciones, Amnistía Internacional elevó una solicitud para que se tomen medidas urgentes contra los crímenes de lesa humanidad que están sucediendo en Venezuela.
Como parte de esta contraofensiva para detener la barbarie presentamos este informe desde el Observatorio para la Defensa de la Vida, ODEVIDA, al que titulamos “Defender derechos es un derecho, no un delito” ataques, patrones de agresión, presuntos responsables y liderazgos más afectados en Venezuela durante 2024” que espera pueda ayudar a los cientos de personas que aún no pierden la fe en el vecino país y creen que puede ser posible defender derechos sin caer preso y torturado. La democracia en Venezuela hace rato murió.
Informe completo aquí
odevida-informe-Centro para los Defensores y la Justicia (CDJ): Situación de las personas defensoras de derechos humanos en Venezuela – Primer Semestre 2024. Consultado el 24.09.24 en
