María Yanes | La crisis de salud por la que atraviesa Venezuela, la más grave de toda su historia, además de no ser reconocida por el régimen ha sido manejada por las autoridades de salud en base a guiones o argumentos incoherentes y fuera de la realidad dignos de aprovecharlos para un largometraje de ciencia ficción. Además, son notorios la gran improvisación y desconocimiento en el manejo de las políticas sanitarias, si es que existen, por lo cual no podemos afirmar que en nuestro país funciona un sistema nacional de salud el cual ofrezca una adecuada respuesta a todas las necesidades prioritarias en esta área. No obstante, lo más alarmante es que estas supuestas “políticas de salud “se han conducido a base de mecanismos o planes en los cuales pareciera que predomina la improvisación , sobre todo durante los últimos tres años hasta los actuales momentos. Desde el inicio del actual “Gobierno” o mejor dicho de este régimen autoritario en el año 2013, han pasado por el ente rector en salud cinco Ministros incluyendo la actual. A todos se les encomendó por boca del Ciudadano Presidente de la República, a manera de libreto permanente: “Fortalecer la red pública nacional de salud y garantizar el abastecimiento seguro de insumos y medicamentos” y también “liderar el desarrollo de Barrio Adentro I, II y III y el plan hospitalario”. Sobre Barrio Adentro conocemos sus antecedentes, este será otro tema a considerar. Por lo tanto quisiera hacer una breve reseña y análisis respecto al título que encabeza este escrito.

Cifras extraoficiales conocidas por médicos especialistas manejan la información que el número de casos es superior a lo que ambas autoridades manifestaron. Se pone al descubierto el gran fracaso en la cobertura de vacunación

En el mes de febrero del 2015, el Ministerio de Salud bajo la gestión de la Ciudadana. Dra.Nancy Pérez, anuncio de manera pública el arribo a Venezuela de 171 contenedores con “cinco mil equipos para la dotación de hospitales” entre estos estaban equipos de laparoscopia, camas hospitalarias, material quirúrgico, incubadoras y pare Ud. de contar. Sin embargo, en el mes de septiembre del mismo año, también se notificó que habían llegado al Patio del Puerto de la Guaira 150 contenedores con material médico- quirúrgico, incluyendo aquellos materiales de uso corriente ¿Qué pasó con esa inmensa cantidad de insumos? Obviamente no se han visto los frutos o efectos positivos en los centros hospitalarios. Al contrario, en nuestros hospitales la escasez de insumos médico-quirúrgicos aumentó de un promedio de 50% en el 2015 a un 80% en el presente año, según datos de una reciente encuesta realizada a nivel nacional en una muestra representativa de hospitales, en dicha encuesta participó el Observatorio Venezolano de la Salud. Durante la gestión pasada en el Ministerio de Salud se creó el famoso Sistema Integral de Acceso a Medicamentos (SIAMED).Según las autoridades pertinentes dicho sistema garantizaría la distribución y acceso de las medicinas a la población, no funcionó. Posteriormente fue sustituido por el 0800-SALUD el cual no ha ofrecido una respuesta adecuada, tanto así que recientemente la Ciudadana Ministra de Salud recibió un llamado de atención del Ciudadano Presidente por la inoperatividad del mecanismo mencionado a todas luces también improvisado. La realidad es que el desabastecimiento de medicinas no es por falla de distribución sino en la producción y escasez de divisas para la importación. La gran discrepancia que nos asombró fueron las declaraciones emitidas por parte de la Ministro de Salud y el Ciudadano Gobernador del Estado Bolívar con relación a la reaparición de la Difteria, la primera afirmaba que fueron solo tres casos y el segundo confirmó 13 casos, de los cuales habían fallecido cinco pacientes. Cifras extraoficiales conocidas por médicos especialistas manejan la información que el número de casos es superior a lo que ambas autoridades manifestaron. Se pone al descubierto el gran fracaso en la cobertura de vacunación. No puedo dejar de mencionar las declaraciones emitidas recientemente por el Ciudadano Defensor del Pueblo, en un canal de televisión internacional el pasado 24 de Octubre ante una pregunta sobre el desabastecimiento de insumos, medicinas y alimentos. Dicha declaración se centró en que la Defensoría realizó más de “2.500 inspecciones a centros de salud” y “Ha hecho recomendaciones al Ministerio de Salud y Alimentación” además ha escuchado “todas las denuncias de los usuarios”. Sin embargo, a los dos días de esta declaración la defensoría del pueblo en Venezuela fue degradada a categoría B en las Naciones Unidas por no hablar de una manera clara sobre la defensa de los derechos humanos.Perdió su derecho a voz y voto ante esa instancia internacional. La dramática realidad es que el derecho a la salud y alimentación no son garantía en este momento para los venezolanos. Es obvia la percepción que el manejo de la crisis que ha conducido a la violación de estos derechos ha sido en base a contradicciones y mentiras en vez de ofrecer respuestas y soluciones.