NUEVA YORK (31 de marzo de 2017) — Human Rights Foundation (HRF) condena la alarmante decisión tomada por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela, a instancia del presidente Nicolás Maduro, por medio de la cual se despojó de poderes legislativos a la Asamblea Nacional. Con esta decisión, se ha disuelto en la práctica al Poder Legislativo que fue electo democráticamente y que se encuentra controlado por la oposición democrática desde enero de 2016. La decisión se produjo dos días después de que la Organización de Estados Americanos (OEA) celebrara una reunión especial para realizar una evaluación colectiva sobre la ruptura del orden democrático y la crisis humanitaria en Venezuela. Durante la reunión celebrada en la sede de la organización en Washington D.C., el Secretario General de la OEA, Luis Almagro, pidió al gobierno venezolano celebrar elecciones libres y justas a la brevedad posible. Además, Almagro pidió la liberación inmediata de todos los presos políticos y el restablecimiento del orden constitucional con sujeción al estado de derecho.
“Menos de 48 horas después de que la OEA se reuniera para evaluar la situación del autoritarismo venezolano, el gobierno de Maduro se ha comportado al mejor estilo de una dictadura militar, eliminando al poder más democrático de todos y revelando su naturaleza tiránica”, dijo el presidente de HRF Thor Halvorssen. “La OEA debe aplicar lacláusula democrática inmediatamente y suspender a Venezuela de la OEA”, dijo Halvorssen.
El pasado miércoles, el TSJ —que es abiertamente servil al poder ejecutivo desde 2004— declaró en “desacato” a la Asamblea Nacional después de que esta se negara a remover de su cargo a tres asambleístas del Estado de Amazonas. Anteriormente, el TSJ había señalado que los tres asambleístas, quienes otorgan una mayoría numérica a la oposición en la asamblea, estaban involucrados en fraude electoral.
Recientemente, HRF elogió el informe publicado por el Secretario General Almagro, en el que instaba a los Estados miembros a suspender a Venezuela de la OEA por violar “todos los artículos de la Carta Democrática Interamericana”. HRF también aplaudió el compromiso demostrado por Almagro en reencausar a la OEA hacia su misión fundacional de “promover y consolidar la democracia representativa” en el continente americano.
HRF es una organización sin fines de lucro, independiente y apolítica, que promueve la defensa de los derechos humanos a escala mundial, con énfasis en sociedades cerradas.
Human Rights Foundation