Un significativo grupo de gente del libro (libreros, editores, autores, académicos, críticos, traductores, bibliotecarios, distribuidores y afines), han suscrito un comunicado en torno a la situación actual de Venezuela, señalando, entre otras cosas que “nos resulta un deber fundamental la defensa del idioma, y del sentido real de las palabras, tan mancillados por neolenguas y eufemismos impartidos desde el poder como parte de su sistema de subyugación”, convocando “a todos los venezolanos de bien a levantarse y anunciar los tiempos nuevos de la vieja libertad, aquella que nunca nos ha abandonado y que vive en el corazón de todos los hombres con ardor siempre limpio.”

El documento está suscrito por nombres como los de Rafael Cadenas, Ana Teresa Torres, Javier Aizpurua, José Balza, Armando Rojas Guardia, Alvaro Sotillo, Victoria De Stefano y Gustavo Guerrero, entre otros, además de cerca de 300 firmas ligadas al mundo del libro y de la palabra.

A continuación, el documento con las firmas.

Libertad bajo palabra

Gente del Libro en torno a la situación actual del país

Vivimos los días más difíciles de la República: una dictadura pretende acabar con ella y avanza inexorable hacia ese terrible final. Durante años, miles de venezolanos han permanecido fieles a los valores de la República y de la Democracia. Nosotros, gente del libro, hemos estado en las primeras filas de esa defensa. No consideramos otro camino, pues nuestras herramientas se encuentran presentes en la palabra, ligada siempre a la libertad.

Los poderes autónomos han sido secuestrados por un solo ente: el Ejecutivo, que usurpa todo el poder para convocar una Constituyente fraudulenta, irrespetando la letra y el espíritu de nuestra Constitución. La palabra ha sido vaciada de sentido, manipulando y pervirtiendo el lenguaje,  rebajándolo al insulto.

Hemos perdido la lengua común de la Nación.

En estos días aciagos, cuando cerca de cien venezolanos, en su mayor parte jóvenes, han fallecido a causa de la represión ejercida por fuerzas civiles y militares del régimen, cuando miles de heridos y detenidos engrosan el archivo perverso de un gobierno dictatorial y enlutan al país, llamamos a defender la libertad de las ideas y del pensamiento como formas altas del Ser y parte central de lo que nos define como individuos y habitantes de un país hermoso, que lleva poco más de doscientos años rodando por el mundo y definiendo su rostro.

Nos encontramos, insistimos, en los días más difíciles de la República. Las enfermedades han regresado a las casas, la miseria humana recorre nuestras calles y avenidas, pero aun en este tiempo nos sostenemos en las luchas libradas a través de la palabra por nuestros ancestros. Fermín Toro, Juan Antonio Pérez Bonalde, José Rafael Pocaterra, Rómulo Gallegos, Rufino Blanco Fombona, Teresa de la Parra y Andrés Eloy Blanco, entre otros, nos acompañan. Es necesario enfrentar la militarización de la sociedad, a los arrebatados de siempre en nuestra historia, los peores entre nosotros.

Somos gente del libro y la palabra, y desde la palabra hacemos un llamado a la libertad del pueblo venezolano, libertad que merecemos y que, cuando nos ha sido truncada, la hemos peleado y rescatado. Somos gente de la palabra, aquella que publicó Memorias de un venezolano de la decadenciaEl libro negro de la dictadura y Se llamaba SN, que denunció con ardor los excesos de Juan Vicente Gómez y Marcos Pérez Jiménez. Somos gente del libro y hemos sabido de censura, incluso en los años de la democracia, pero la hemos enfrentado y denunciado.

Somos gente de la palabra y es por ello que nos resulta un deber fundamental la defensa del idioma, y del sentido real de las palabras, tan mancillados por neolenguas y eufemismos impartidos desde el poder como parte de su sistema de subyugación.

Reconocemos el maravilloso legado de la lengua española, y desde ese lugar central que debe ocupar en la vida de los hombres y mujeres que componen esta República, llamamos a rescatar la educación, el conocimiento y su estrecho vínculo con la libertad natural que define la vida de todo habitante de esta tierra.

Entre nosotros, lo urgente ha estado casi siempre por delante de lo importante, en especial en los últimos años. Nunca más. La palabra es acción, y es un hoy que anuncia una nueva alborada: la del rescate inmediato de la República por todos los venezolanos. Rescatarla de un Estado represivo y corrupto representado en el régimen de Nicolás Maduro.

Nosotros, gente del libro y la palabra, decimos basta. Basta de represión, de asesinar a nuestros hijos, de perseguir vecinos, de encarcelar inocentes.

Desde la cólera más antigua de la lengua, pero también desde la serenidad de su historia y del legado civil de nuestro país, convocamos a todos los venezolanos de bien a levantarse y anunciar los tiempos nuevos de la vieja libertad, aquella que nunca nos ha abandonado y que vive en el corazón de todos los hombres con ardor siempre limpio.


Gente del Libro